En febrero de 2021, tres misiones, de China, Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos, llegan a Marte. Es un gran momento para la exploración espacial del planeta rojo. Las próximas fechas serán importantísimas para definir qué sucederá y para ver si dos países se unen a la lista de visitantes del planeta rojo…

Hope Mars, la primera de las misiones que llegan a Marte este mes

Hope Mars es la primera misión de Emiratos Árabes Unidos. Llegará al planeta rojo el martes 9 de febrero. Será la primera de las tres misiones que llegan a Marte en estas semanas. Si todo sale bien, la nación se convertirá en la quinta que logra entrar en la órbita del planeta rojo. El miércoles, solo un día después, China podría convertirse en la sexta nación que lo consiga. La nave Hope (llamada Al-Amal en árabe), orbitará el planeta durante al menos un año marciano. Es decir, aproximadamente 687 días terrestres. China y Estados Unidos aterrizarán en el planeta.

Tres misiones llegan a Marte en los próximos días
Concepto artístico de la misión Hope Mars en torno a Marte. Crédito: Mohammed Bin Rashid Space Centre MBRSC

Tan solo Estados Unidos, India, la antigua Unión Soviética y la Agencia Espacial Europea han logrado alcanzar Marte. Tras despegar desde Japón en julio de 2020, la misión Hope llega ahora a su momento decisivo. Tendrá que enfrentarse a una maniobra compleja para entrar en órbita del planeta. El equipo de misión considera que hay un 50% de posibilidades de éxito. La nave tiene que frenar enormemente para ser capturada por la gravedad de Marte. Encenderá sus motores durante 27 minutos para reducir su velocidad de 121 000 km/h a 18 000 km/h.

El proceso consumirá la mitad del combustible de la nave. Comenzará el martes a las 15:30 GMT (16:30 en la Península Ibérica) y se tardará 11 minutos en recibir la señal en control de misión. Los investigadores también insisten en que es un honor ser la primera nación, de las tres, en llegar a Marte. Pero que, en ningún caso, se trata de una carrera. Su objetivo es analizar la atmósfera de Marte y ayudar a entender mejor el comportamiento de su atmósfera y su meteorología. Se espera que los datos, si todo va bien, comiencen a recibirse en septiembre de este mismo año.

China ya está en marcha con Tianwen-1

En el caso de China, la nave Tianwen-1 ya está en marcha, aunque todavía no ha alcanzado la órbita del planeta. Ya ha enviado su primera imagen de Marte. En blanco y negro, muestra algunas características del planeta, como el cráter Schiaparelli y el Valles Marineris, un gran conjunto de cañones que recorre la superficie marciana. Tianwen-1 es, en realidad, un conjunto de herramientas de lo más variado. Por un lado, tenemos un orbitador, que permanecerá en órbita del planeta (naturalmente). Por otro, un aterrizador y un róver.

Maqueta del róver de la misión Tianwen-1 de China. Crédito: Pablo de León/Wikimedia Commons

El róver utilizará energía solar y, durante tres meses, estudiará el suelo y la atmósfera del planeta. Tomará fotos, creará mapas y buscará señales de posible vida ya extinta. Sin embargo, habrá que esperar hasta mayo para ver el intento de aterrizaje del róver en Utopia Planitia, una gigantesca cuenca de impacto en el planeta rojo. Cuenta con in radar que atravesará la superficie del planeta, permitiendo explorar su estructura interior y buscando señales de agua almacenada bajo la superficie. Ya se encontraron indicios de lagos salados en 2018 con la Mars Express Orbiter.

Para China, esta nueva aventura será crítica. La nación ya sabe lo que es fracasar en el intento de llegar al planeta rojo. Sucedió en 2011, cuando la misión Yinghuo-1, junto a la misión Fobos-Grunt de Rusia, no logró abandonar la órbita de nuestro planeta. Hay que recordar que, aproximadamente, el 50% de las misiones con destino a Marte fracasan. El éxito no está ni mucho menos garantizado. No podemos olvidarnos, además, de los siete minutos de terror. Algo a lo que la NASA ya está acostumbrada y que China también vivirá con Tianwen-1…

Perseverance, un nuevo capítulo para la NASA

El 18 de febrero, el róver Perseverance llegará a Marte. Aterrizará en el cráter Jezero con el objetivo de estudiar un entorno de lo más interesante. Allí se conservan las huellas de los antiguos ríos que una vez recorrieron el planeta. La misión intentará encontrar señales de antigua vida microbiana en esta región, esperando encontrar las pistas en las rocas que se analicen durante la campaña. El róver tomará fotografías, vídeos, triturará rocas con un láser, para determinar su composición química, y se buscarán moléculas orgánicas…

Concepto artístico del róver Perseverance de la NASA. Crédito: NASA/JPL-Caltech

También llevará a cabo otras tareas. Una de las más interesantes, sin duda, es la recogida de una muestra del suelo marciano. El objetivo es que, ya en la década de 2030, sea traída de vuelta a la Tierra por una misión tripulada. Perseverance es un róver algo más grande que Curiosity. Es el más grande y pesado enviado hasta ahora al planeta rojo, y, a diferencia de sus antecesores, va a estar acompañado. Junto a él viaja un pequeño dron que intentará volar en una atmósfera que es cien veces más fina que la de nuestro planeta.

Pero antes de que pueda entrar en funcionamiento, el róver tendrá que aterrizar en el planeta. Para ello, tendrá que llevar a cabo una serie de maniobras, a lo largo de siete minutos, que permitirán que pueda descender de forma segura. De otro modo, se estrellará en la superficie. Todo el proceso es realizado de forma autónoma por el ordenador de a bordo. Sea como fuere, en los próximos días, tres países llegan a Marte con objetivos muy variados. Que todo salga bien dependerá de los respectivos ordenadores de a bordo. Desde aquí, solo podremos observar y esperar que todo vaya bien…

Referencias: Phys, Phys (2)