La NASA, a través de la misión TESS, y Breakthrough Listen van a unir fuerzas en la búsqueda de señales de vida extraterrestre inteligente. Es una de las iniciativas más interesantes, por los recursos y experiencia que aportan ambos, en el campo de la búsqueda de vida extraterrestre inteligente de los últimos años…
NASA y Breakthrough Listen aportan fortalezas diferentes
La participación de Breakthrough Listen implica la aportación de todos los recursos de los que dispone. Hay que recordar que se trata de una iniciativa con un presupuesto de 100 millones de dólares. Busca investigar el millón de estrellas más cercano al Sol y 100 galaxias cercanas a la Vía Láctea. El satélite TESS, por su parte, tiene como objetivo analizar el 85% del firmamento. Estudiará miles de estrellas, en cada momento, en busca de caídas en su brillo. Una señal de que un planeta podría estar orbitando a su alrededor.
En la asociación que han anunciado, se formará un equipo integrado por personas de ambos proyectos. Dado que TESS es el satélite encargado de detectar exoplanetas, será el primer pilar de la colaboración. Breakthrough Listen seguirá en los pasos de TESS, intentando descubrir la presencia de señales tecnológicas en alguno de los exoplanetas que el satélite vaya descubriendo a lo largo de su misión. Hay que recordar que el objetivo de Breakthrough Listen es encontrar posibles civilizaciones en otros lugares de la galaxia.
Las señales tecnológicas, como una señal de radio, son las únicas huellas irrefutables de la presencia de una civilización en algún otro planeta. El resto de evidencias no permitirían determinar, sin género de duda, que ese hipotético mundo pudiese estar habitado por criaturas inteligentes. Sin la presencia de esas señales, como mucho, se podría determinar si un planeta está habitado (estudiando su atmósfera, por ejemplo), pero sin poder llegar a afirmar si contiene vida inteligente.
Los beneficios de TESS
TESS es el sucesor del popular telescopio Kepler, que fue responsable de la mayoría de los exoplanetas descubiertos hasta la fecha. Se espera que su sucesor sea capaz de detectar 10 000 planetas (o más), gracias a su instrumentación, mucho más avanzada que la que incorporaba su antecesor. Además, TESS puede encontrar exoplanetas mucho más cercanos a la Tierra de lo que lo hacía Kepler. Eso permite que, en caso de haberlas, se puedan captar señales tecnológicas mucho más débiles, con una cantidad de energía menor.
TESS es capaz de detectar planetas cuyas órbitas están de perfil respecto al Sistema Solar, algo que es beneficioso para los objetivos de Breakthrough Listen. Porque, en la Tierra, el 70% de las emisiones de radio que atraviesan la atmósfera son emitidas en torno al plano de la órbita, es decir, alrededor del ecuador. Si lo mismo sucede en otros casos, se espera que sea más fácil detectar esas señales en sistemas que estemos viendo de perfil (en oposición a un sistema cuyas órbitas, desde nuestra perspectiva, fuesen alrededor de la estrella, sin pasar por delante).
Por su parte, Breakthrough Listen aporta algunas de las herramientas más avanzadas para intentar encontrar señales de vida inteligente extraterrestre. Entre las instalaciones con las que cuentan están los telescopios más potentes (tanto del espectro visible como de radio) repartidos por diferentes lugares del mundo. Además, también se analizarán las curvas de luz, captadas por TESS, en busca de señales que puedan corresponderse a estructuras alienígenas propias de una civilización muy avanzada.
En busca de construcciones alienígenas
Entre esas posibles estructuras están, por supuesto, las archipopulares esferas de Dyson, gigantescas estructuras, alrededor de una estrella, diseñadas para poder aprovechar toda la energía que emite el astro, y que una civilización mucho más avanzada que la nuestra podría utilizar. Si una estructura así existiese, su presencia podría detectarse en las caídas de luz que se observarían en las curvas medidas por TESS. Pero, en todo esto, también hay sitio para la astrofísica más tradicional, dedicada al estudio del universo y de las estrellas.
Porque esas curvas de luz también serán analizadas en busca de señales que puedan apuntar a comportamientos extraños. Algo que podría permitir descubrir estrellas que muestren un comportamiento anómalo. Aunque ello no quiera decir, necesariamente, que se deba a la presencia de una civilización extraterrestre a su alrededor. Tenemos, como ejemplo de ello, el caso de la estrella de Tabby. Inicialmente se llegó a plantear, incluso, que podría tener una esfera de Dyson a su alrededor. Pero, finalmente, se entendió que se debe a un fenómeno natural.
En cualquier caso, sea como fuere, lo cierto es que la colaboración entre NASA y Breakthrough Listen es muy interesante. Aunque parece poco probable, podría permitir detectar la existencia de alguna civilización. Pero también podría ayudar a encontrar respuesta a fenómenos que todavía no están bien entendidos, como la enigmática señal Wow!. En los próximos meses, y años, veremos los resultados de esta unión. Tanto si sale algo positivo, como si no, servirá para dar más visibilidad a la búsqueda de vida extraterrestre inteligente.
Referencias: Universe Today