La NASA ha anunciado la nueva fecha de lanzamiento para la misión Artemisa I después de que tuviese que ser pospuesta el pasado lunes, 29 de agosto. La agencia espacial estadounidense ha anunciado que el lanzamiento se llevará a cabo el próximo sábado, 3 de septiembre, aunque no será fácil…
Una nueva fecha de lanzamiento que puede ser problemática… y no por el cohete de Artemisa I
El pasado 29 de agosto, lunes, Artemisa I iba a poner rumbo a la Luna. Sin embargo, los incidentes comenzaron desde la medianoche en Florida. Debido a las condiciones meteorológicas, la carga de combustible se retrasó una hora. Un tiempo que se recuperó posteriormente gracias al buen trabajo del equipo del cohete SLS. Sin embargo, no fue el único sobresalto que se produciría antes de la cancelación. Se encontró una pequeña fuga de hidrógeno que fue reparada, así como una fisura que podía ser de la estructura metálica del cohete.
Se determinó, afortunadamente, que en realidad era una fisura del aislamiento y que no suponía un problema. El gran inconveniente llegó cuando comenzó el proceso de acondicionado de los motores. Para que todo funcione correctamente, los motores del SLS están conectados a un sistema de vertido (o sangrado) que reduce su temperatura hasta los -250ºC (y no los 5ºC mencionados inicialmente). El proceso funcionó en los motores 1, 2 y 4. El motor 3, sin embargo, marcaba una temperatura superior, en torno a los -220ºC.
Aunque puede parecer una diferencia pequeña, fue suficiente para no considerarlo un valor seguro. A esto hay que sumar que, en el momento del lanzamiento, las condiciones meteorológicas impedían que se pudiese llevar a cabo. Al tener en cuenta que la reparación sería larga, se decidió descartar el lanzamiento el lunes. Sencillamente, la reparación no terminaría antes de que se agotase la ventana de lanzamiento. Todo esto, en mayor o menor detalle, ya se comentó el mismo lunes. Ahora, la NASA ha dado más explicaciones.
Un problema que podría estar relacionado con un sensor
Con un análisis más calmado de los datos, llevado a cabo el martes, 30 de agosto, el equipo de Artemisa I no está completamente seguro de que el motor no estuviese refrigerado correctamente. El sensor que mide la temperatura indicaba que el motor 3 no estaba suficientemente frío. Sin embargo, según han explicado, lo que se observaba en el motor hacía pensar que sí estaba funcionando correctamente. Por lo que es posible que, simplemente, todo se reduzca a un sensor que funciona incorrectamente. El motor estaría bien.
El problema es que no se puede cambiar ese sensor en la plataforma. La operación, según explicaban, es suficientemente compleja como para obligar a retrasar el lanzamiento todavía más. El equipo cree que puede utilizar el resto de información (sobre el estado de los motores y otros factores) para determinar si el motor número 3 está enfriado correctamente. También han anunciado que realizarán modificaciones al proceso de carga de combustible y pruebas, para poder identificarlo con más antelación en caso de que se repitiese.
Este tipo de problemas con los sensores, explicaba John Honeycutt, del programa del SLS, no son tan raros como se podría pensar. El sensor, de hecho, no fue revisado tras salir de fábrica. Algo comprensible al no ser un componente esencial para el lanzamiento. A pesar de todo esto, los propios representantes de la NASA, en la rueda de prensa, insistían en que el equipo sigue revisando los datos del lanzamiento fallido. No quieren llegar a conclusiones apresuradas (como suponer que todo se debe, simplemente, a un sensor defectuoso).
Pendientes de la meteorología este próximo sábado
Sea como fuere, lo cierto es que el lanzamiento de Artemisa I tiene como nueva fecha de lanzamiento el sábado 3. Se llevará a cabo a las 14:17 (hora local). Es decir, a las 20:17, en horario peninsular español, 19:17 en Canarias, 13:17 en CDMX o 15:17 en Buenos Aires. Apenas un día después de lo previsto inicialmente (que era el viernes 2 de septiembre). Hay algunos factores de los que habrá que estar pendientes el próximo sábado. Por un lado, naturalmente, el estado de ese motor número 3 y el proceso de preparación para el lanzamiento.
Por otro, la meteorología será un factor importante. La previsión de que el lanzamiento se realice es de un 40%. Algo propiciado por diferentes factores. Se espera que haya tormentas cerca de la zona de lanzamiento. De acercarse lo suficiente, habría que esperar a que las condiciones mejorasen para llevarlo a cabo. La esperanza, por parte de NASA, es que haya algún momento, en esa ventana de dos horas, donde las condiciones sean suficientemente buenas. Las tormentas en la región, por lo general, suelen estar muy separadas.
Si el sábado no se llegase a realizar el lanzamiento, la siguiente fecha depende de qué motive su cancelación. Si es exclusivamente meteorológica, la nueva oportunidad sería el lunes 5 de septiembre. Si, por el contrario, se debiese a algún problema con el cohete, habrá que esperar a la evaluación del personal de NASA. Esperemos que, esta vez sí, Artemisa I se pueda llevar a cabo y llevar la cápsula Orión en su viaje alrededor de la Luna. Hay que recordar que esto permitirá certificar que tanto cohete como cápsula están listos para las misiones tripuladas…
Referencias: NASA