Un grupo de investigadores ha analizado un exoplaneta rocoso, llamado YZ Ceti b, que parece poseer un campo magnético. Es algo interesante, porque sabemos lo importante que es. En nuestro planeta, el campo magnético es esencial para preservar las condiciones necesarias para la vida…

YZ Ceti b: un exoplaneta rocoso con un campo magnético… y cercano al Sistema Solar

El campo magnético de la Tierra es extremadamente importante. No solo hace que las brújulas apunten en la misma dirección, también proteger la fina atmósfera terrestre, al desviar las partículas energéticas y el plasma que llega desde el Sol. Por eso, el descubrimiento de que YZ Ceti b, un exoplaneta rocoso, que tiene un campo magnético, resulta tremendamente interesante. Así lo ha detallado un grupo de investigadores, que ha analizado este mundo a 12 años-luz del Sistema Solar. La detección ha sido posible gracias al Very Large Array.

Un exoplaneta rocoso con campo magnético
Esta ilustración artística muestra a Kappa Ceti, una estrella mucho más joven que el Sol, interaccionando con el campo magnético de un planeta rocoso. Crédito: M. Weiss/CfA.

Con la ayuda de este radiotelescopio, los investigadores detectaron una señal de radio en repetición, procedente de la estrella YZ Ceti. Su objetivo es entender la interacción entre el campo magnético de estrellas lejanas y los planetas a su alrededor. La búsqueda de mundos potencialmente habitables, o quizá incluso habitados, en otros sistemas solares, explican, depende en parte de la capacidad de determinar si es un mundo rocoso. Los planetas similares a la Tierra podrían tener campos magnéticos. El estudio plantea un panorama interesante.

No solo porque este exoplaneta, en particular, seguramente tenga un campo magnético. También porque proporciona un método prometedor para encontrar más. El campo magnético de un planeta tiene la capacidad de impedir que las partículas procedentes de su estrella arranquen la atmósfera. Su supervivencia depende, directamente, de si el campo magnético es lo suficientemente intenso como para resistir el asalto de partículas de la estrella. La detección se realizó al analizar las ondas de radio procedentes de la estrella.

Los campos magnéticos son invisibles

Así, los investigadores sugieren que las ondas de radio estelares que detectaron son el producto de las interacciones entre el campo magnético del exoplaneta y la estrella. Sin embargo, para que esas ondas de radio sean detectables a grandes distancias, deben ser muy intensas. Hasta ahora, se había logrado detectar campos magnéticos en planetas masivos, similares a Júpiter. Pero conseguirlo para un mundo comparativamente pequeño, como los similares a la Tierra, requiere de una técnica diferente. Los campos magnéticos son invisibles.

Así que es difícil determinar si un planeta lejano tiene uno. Por lo que los investigadores, en realidad, están buscando una manera de encontrarlos. Están buscando planetas que sean muy cercanos a sus estrellas y que tengan un tamaño similar al de la Tierra. Concretamente, planetas que estén muy cerca de sus estrellas. No serían mundos habitables, pero al estar tan cerca, es como si estuviesen surcando a través del material procedente de la estrella. Si el planeta tiene un campo magnético, en ese contexto, la estrella emitirá ondas de radio brillantes.

YZ Ceti es una enana roja, junto a su exoplaneta, YZ Ceti b, forma una pareja perfecta porque está muy cerca de la estrella. Tarda solo dos días en completar una órbita. Mercurio, en comparación, tarda 88 días en completar una órbita alrededor del Sol. El plasma de YZ Ceti se aleja de la estrella y choca con el campo magnético del planeta. Después, interactúa con el campo magnético de la propia estrella, generando ondas de radio tan intensas como para observarlas desde la Tierra. La intensidad de esas ondas de radio se puede medir, permitiendo determinar la fuerza del campo magnético del planeta.

Un exoplaneta rocoso con un campo magnético tendrá auroras

Así que, por ejemplo, se puede pensar en escenarios como el de auroras en mundos extraterrestres. El trabajo, en esencia, proporciona nueva información sobre el entorno de las estrellas. Los investigadores lo denominan meteorología espacial extrasolar. Las partículas de alta energía del Sol, y a veces enormes ráfagas de plasma, crean meteorología espacial alrededor de la Tierra. Las eyecciones del Sol pueden perturbar las comunicaciones globales y provocar cortocircuitos en la electrónica de los satélites, e incluso en la superficie de la Tierra.

La luna llena de febrero, fotografiada junto a la aurora en 2018. Crédito: Tobias Bjørkli/Pexels

La interacción entre la meteorología solar, el campo magnético terrestre y la atmósfera también crea el fenómeno de las auroras polares. En YZ Ceti b, las interacciones con su estrella producen una aurora, pero con una diferencia importante y llamativa. La aurora tiene lugar en la propia estrella. Eso es, explican los investigadores, lo que muestran las emisiones de radio. También debería haber una aurora en el planeta, suponiendo que tenga su propia atmósfera. Los investigadores concuerdan en que YZ Ceti b es el mejor candidato a exoplaneta rocoso con su propio campo magnético.

Aunque no está del todo claro, el escenario es plausible. por lo que habrá más estudios para confirmar que, realmente, las ondas de radio son producto del campo magnético del planeta. La llegada de nuevos radiotelescopios hará que este tipo de detecciones, en el futuro, se puedan realizar de manera más sistemática. Así que, en los próximos años, es posible que el panorama cambie de una manera importante. Quizá sea cuestión de tiempo conocer muchos más exoplanetas rocosos que tengan un campo magnético y, también, que estén en la zona habitable…

Estudio

El estudio es J. Pineda y J. Villadsen; «Coherent radio bursts from known M-dwarf planet-host YZ Ceti». Publicado en la revista Nature Astronomy el 3 de abril de 2023. Puede consultarse en este enlace.

Referencias: Phys