Esta semana, en Misterios del Universo 1×11 hablamos de la materia oscura, profundizando en por qué se plantea su existencia y las evidencias que apoyan ese razonamiento. En YouTube, además, hablamos de un estudio que plantea cómo obtener oxígeno de manera artificial (y más eficiente que en la actualidad)…
Misterios del Universo 1×11: La materia oscura (I)
La materia oscura es uno de los aspectos más intrigantes y desconcertantes del universo. Es mucho más abundante que la materia normal (o bariónica) y su presencia es imprescindible para explicar por qué el cosmos es tal y como lo conocemos. De hecho, su existencia se deriva de la observación del entorno. Las galaxias, por ejemplo, no deberían comportarse tal y como lo hacen si solo hubiese materia normal. De hecho, las galaxias no serían capaces de mantenerse unidas si solo se tuviese en cuenta la materia visible que contienen.
Así que, por tanto, debe haber una fuente adicional de gravedad, que permite explicar por qué una galaxia se mantiene unida. En realidad, también permite explicar otras cosas que, sin su presencia, resultarían anomalías. Por ejemplo, las estrellas más alejadas del centro orbitan tan (o incluso algo más rápido) que otras más cercanas. Lo mismo sucede en el estudio de los cúmulos de galaxias que se pueden ver a lo largo y ancho del universo. Son solo algunos de los ejemplos que podemos mencionar que hacen pensar en la materia oscura.
Además, no todos los científicos están de acuerdo en que existan. Eso quiere decir, por tanto, que también nos encontramos con modelos alternativos, donde se intenta dar explicación a lo que podemos observar sin tener que recurrir a la presencia de materia oscura. Sin embargo, estos modelos terminan siendo incapaces de explicar qué es lo que sucede en algún otro aspecto del universo, que está bien entendido. Como siempre, puedes escuchar Misterios del Universo 1×11 en iVoox, en la aplicación de iOS o Android, en su web y aquí mismo:
YouTube: La fotosíntesis artificial
En YouTube, además, como cada semana, nos enfrentamos a un nuevo tema. Esta vez, hablamos de la importancia de poder obtener oxígeno, de manera artificial, para poder pensar en tener presencia humana permanente lejos de la Tierra. En la Estación Espacial Internacional ya hay un sistema para obtener oxígeno. Utiliza dos mecanismos diferentes. Por un lado, la electrolisis permite separar el agua en hidrógeno y oxígeno. Por otro, el dióxido de carbono se puede reciclar para obtener oxígeno respirable para la tripulación.
El inconveniente es que este tipo de sistemas son, todavía, muy voluminosos y requieren de mucha energía. Sin ir más lejos, este sistema supone la tercera parte del total de energía del sistema de soporte vital de la estación. Por lo que, naturalmente, cualquier trabajo orientado a disminuir el tamaño del mecanismo es algo que resulta tremendamente atractivo. Un grupo de investigadores plantea que, de hecho, tecnológicamente es posible tener, por ejemplo, un sistema que utilice la energía solar, muy abundante en el entorno de nuestro planeta y la Luna.
Incluso en Marte, a más distancia del Sol, sería posible utilizar la energía solar para asegurar el funcionamiento del sistema. Sin embargo, tecnológicamente no estamos todavía en la situación de poder pensar en sistemas así. Por lo que es necesario pensar en otras alternativas para evaluar su viabilidad. Es algo que tiene mucho de repaso de en qué punto se encuentra el desarrollo de la tecnología para tener presencia permanente lejos de nuestro planeta. Como siempre, puedes ver el vídeo en el canal de YouTube, en este enlace o, si lo prefieres, al principio de este artículo.
