Una de las historias más extendidas, probablemente, de todo lo sucedido en torno a Apolo 11, fue la supuesta admisión de haber observado un OVNI por parte de Buzz Aldrin. Sin embargo, tal y como ha explicado el astronauta en más de una ocasión, lo que vio estuvo muy alejado de cualquier relación con posibles extraterrestres…
El supuesto OVNI que vio Buzz Aldrin
Algunos conspiracionistas creen, erróneamente, que Buzz Aldrin admitió ver un OVNI durante su viaje en Apolo 11 a la Luna. No solo eso, están convencidos de que lo que vio, más concretamente, fue una nave extraterrestre. Por supuesto, la historia no se ha quedado ahí, defienden que, en realidad, el propio Aldrin cree en el fenómeno OVNI y que ha estado ocultándolo desde entonces. Sin embargo, no es necesario escuchar el testimonio del propio astronauta para saber que algo aquí no termina de encajar con lo que deberíamos esperar.
Por un lado porque, obviamente, no sabemos que es un OVNI. Literalmente significa objeto volador no identificado. Insinuar que se trataba de una nave extraterrestre sería identificarlo. Es decir, inmediatamente dejaría de ser un OVNI y se convertiría en otra cosa. Con el tiempo, el término se ha ido transformando en un sinónimo de nave extraterrestre. Lo más irónico es que, de haber habido alguna otra nave, los astronautas, y los astrónomos, tanto profesionales como aficionados, en la Tierra, habrían captado sus señales. Sin importar lo avanzada que fuese.
Porque una nave necesita energía para moverse. Esa presencia es detectable en el espectro electromagnético. También, parece razonable suponer, en el espectro de radio se podría haber detectado algún intento de comunicación. No parece muy lógico suponer que unos extraterrestres, de haberlos, visitarían la Tierra, coincidiendo justamente con Apolo 11, y ni siquiera se molestarían en intentar contactar con nosotros. Como si fuesen turistas sacando unas fotos de alguna atracción. No parece muy plausible. Pero hay fuente aún mejor.
La realidad es que no hubo OVNI alguno
Buzz Aldrin si vio un OVNI si nos ceñimos a la definición clásica. Vio algo que no sabía con certeza qué era. Pero como él mismo ha explicado, en lugares como Reddit en 2014, los extraterrestres no eran una posibilidad. Lo explicaba así: «En Apolo 11, camino a la Luna, vi una luz, a través de la ventana, que parecía moverse con nosotros. Había muchas explicaciones sobre qué podía ser, además de que pudiese ser una nave de otro país o de otro mundo. Podía ser el cohete del que nos habíamos separado, o alguno de los cuatro paneles…
Que se alejaron al extraer el módulo lunar del cohete, y tras poner ambos módulos (el lunar y el de mando) frente a frente. Así que, a nuestro alrededor, alejándose, había 4 paneles. Estoy completamente convencido de que estábamos viendo el reflejo del Sol en uno de esos paneles. ¿En cuál? No lo sé. Así que técnicamente, podríamos decir que era un objeto no identificado. Pero entendíamos bien qué era exactamente. Y, cuándo volvimos, lo repasamos y explicamos exactamente qué era lo que habíamos visto. Creía que aquello se había contado al resto del mundo.
Pero parece ser que no fue así. Por lo que, muchos años después, tuve la oportunidad de hacer estos comentarios, en la cadena de televisión de otro país. Y los aficionados a la ufología, en los Estados Unidos, se enfadaron mucho conmigo porque no les había dado la información. No era un alienígena. Las afirmaciones extraordinarias requieren evidencias extraordinarias. Eso decía Carl Sagan. Podría haber alienígenas en la Vía Láctea, y hay miles de millones de galaxias. La probabilidad de que haya vida en otros lugares es enorme». Y continúa…
El problema de las distancias
Buzz Aldrin terminaba así su declaración: «No era nada destacable, ni especial ni poco común, que la vida aquí en la Tierra evolucionase gradualmente, poco a poco, hasta llegar al punto en el que estamos hoy en día. Pero las distancias a tener en cuenta, respecto a dónde podrían estar esas evidencias de vida, son tan grandes, que podrían estar a cientos de años-luz». Es decir, no hubo ningún OVNI, como explica Buzz Aldrin. Pero sí cree, como sospechan muchas personas, que la vida podría ser relativamente frecuente en la galaxia.
El problema, precisamente, es la distancia a la que está todo. Nuestra galaxia mide, aproximadamente, 120 000 años-luz. La luz, por tanto, tarda 120 000 años en viajar de un extremo a otro. Aunque se han planteado posibles métodos de viaje, para cubrir grandes distancias sin superar la velocidad de la luz, nuestra tecnología no tiene esa capacidad. Eso, sin embargo, no nos impide saber qué señales se deberían buscar en el espacio para detectar, por ejemplo, un posible agujero de gusano. No hay nada que haga pensar que existan.
Dicho de otra manera, incluso si hay vida en otros lugares de la galaxia, puede que nunca lleguemos a estar en contacto con ellos porque, simplemente, es imposible viajar a velocidades cercanas a la de la luz o con métodos alternativos. Algo que nos dejaría, como única opción, el viaje a velocidades inferiores a la de la luz. Tardaríamos mucho tiempo en llegar a otros lugares de la galaxia. Sea como fuere, Buzz Aldrin no vio ninguna nave extraterrestre durante Apolo 11. Pero consiguió una hazaña de otro mundo: caminar sobre la superficie de la Luna.
Referencias: Business Insider