Los lanzamientos del SLS, el nuevo cohete de la NASA, podrían ser insostenibles. Según el Inspector General de la NASA, cada lanzamiento podría llegar a costar unos 4100 millones de dólares. Una cifra que sería alrededor del doble de lo que se planteaba originalmente (y que tampoco es barato)…

El absurdo coste de los lanzamientos del SLS

El análisis del Inspector General de la NASA resulta poco alentador. La cantidad de dinero que costarán los lanzamientos del SLS es completamente desorbitada. Aproximadamente, lanzar un kilo de material, a la órbita baja de la Tierra, costará 58 000$, teniendo en cuenta las masas que se espera lanzar. Es cierto, por otro lado, que el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS, por sus siglas en inglés) va a ser el sistema de lanzamiento más grande creado hasta la fecha. Siempre que, claro está, consigan llegar a despegar, porque todavía no ha volado.

Los lanzamientos del SLS podrían ser insostenibles
El cohete Saturno V, en las horas previas al lanzamiento de la misión Apolo 17 en 1972. Crédito: NASA

Esto quiere decir que tendrá la capacidad de enviar cargamentos que, hasta ahora, no era posible poner en órbita. Pero ¿qué ha provocado que el coste de los lanzamientos del SLS se hayan podido doblar? El desarrollo del cohete comenzó en 2011, después de que la NASA retirase el Transbordador Espacial. Al carecer de un sistema de lanzamiento, para enviar a sus astronautas al espacio, la agencia espacial contactó con sus socios comerciales. Buscaba ayuda en su diseño y en su construcción. Inicialmente, el presupuesto era de 7000 millones de dólares.

El coste del proyecto se ha disparado hasta los más de 23 000 millones de dólares, y todavía no se ha terminado. De hecho, se produjo un retraso adicional que ha obligado a retrasar la primera prueba del SLS 1 hasta el mes de mayo de 2022. Desde la propia NASA, ya se ha comentado que incluso esa nueva fecha podría ser difícil de alcanzar. Así que no debería sorprendernos si se anuncian más retrasos. Lo más importante, teniendo en cuenta la estimación de lanzamiento del cohete es… ¿quién es el culpable del aumento de gasto?

El problema parece ser el congreso de EE. UU.

Cuando un programa federal público (como es este) entra en problemas de coste, se suele intentar determinar quién es el culpable. Paul Martin, el Inspector General de la NASA, ha señalado directamente a los representantes en el comité. El congreso, a su entender, ha sido el responsable al limitar a la agencia espacial. Lo hizo al obligar a la agencia a entrar en contratos cost-plus (se puede traducir como como coste positivo) con sus proveedores. Estos contratos implican que, cualquier compañía que trabaje en el proyecto será pagada de una manera específica.

Recibirán el dinero invertido por sus gastos y, además, serán recompensados con una suma superior a la de esos gastos. El problema de este tipo de acuerdos ha sido muy fácil de ver en el caso de las compañías participantes en el SLS: Lockheed Martin y Boeing. Este tipo de contrato anima a las empresas a incurrir en más gastos para la misma cantidad de trabajo. Así, aumentan también esa suma que recibirán posteriormente. Boeing ha sido objeto de las iras de Paul Martin. El Inspector General no ha dudado en criticarles duramente.

La empresa pasa por un momento complicado. Se ha enfrentado a diferentes crisis (de relaciones públicas) en los últimos años. Paul Martin ha criticado a la compañía, poniendo en duda su capacidad técnica y de gestión de proyecto. Destacando que, a pesar de su mal rendimiento, han recibido una jugosa bonificación por su incompetencia. La política parece que ha tenido mucho que ver en ello. El SLS ha dado multitud de empleos en algunos departamentos críticos. Algo que habría sido muy útil para los miembros influyentes del Congreso de EE. UU.

El hecho de ser un cohete desechable tampoco ayuda…

Para esos congresistas, que haya un exceso de gasto es poco importante. Para cualquier otra persona, que no se beneficie de esos contratos directamente, la sensación es completamente diferente. Parece que el gobierno de Estados Unidos no tiene problema en gastar miles de millones de dólares en un cohete que estará obsoleto incluso antes de despegar. ¿Por qué? El cohete es extremadamente caro porque es desechable. A diferencia de naves como Starship, no hay ni un solo componente del SLS que vaya a ser recuperado.

Concepto artístico de la nave Starship en una base lunar. Crédito: SpaceX

La fase principal se perderá en el océano, sin intentar recuperarla. Además, Starship tendrá una capacidad de carga un 30% superior a la del SLS. Al ser reutilizable, Elon Musk asegura que su coste podría llegar a caer, en un futuro no muy lejano, a cifras ridículas. Apenas 10$ por kilogramo de material que se quiera lanzar. Si SpaceX llega a alcanzar esas cifras, el SLS no tendrá ninguna manera de competir. La NASA ya parece ser consciente de esto, porque ha elegido a Falcon Heavy para lanzar su misión Europa Clipper.

Cierto es, por otro lado, que el SLS todavía tiene problemas técnicos. Starship también ayudará para regresar a la Luna en el programa Artemisa. En este caso, parece que la responsabilidad del exagerado coste de los lanzamientos del SLS se debe al gobierno de Estados Unidos. Porque es innegable que se ha llevado a cabo el desarrollo de un cohete, con un presupuesto exageradamente alto, que estará obsoleto desde el momento en el que entre en servicio. Veremos cuál es la cifra final del coste de lanzamiento del nuevo juguete de la NASA…

Referencias: Universe Today