Es lógico que el sistema estelar más cercano al Sol tenga toda nuestra atención. Por eso, no sorprende que se haya publicado un nuevo estudio que analiza las amenazas de Alfa Centauri para la hipotética vida que pudiese desarrollarse alrededor de sus estrellas…

Una década de observaciones

Las amenazas de Alfa Centauri para la vida

El sistema de Alfa Centauri observado en el espectro óptico y en rayos X.
Crédito: Óptico: Zdeněk Bardon/ESO; Rayos X: NASA/CXC/University of Colorado/T.Ayres.

Para ello, se han utilizado los datos de más de una década de observación del observatorio espacial Chandra, que ha observado el sistema en el espectro de rayos X. Los datos parecen muy prometedores. Porque los planetas, si los hay, alrededor de las dos estrellas más brillantes, no estarían siendo sometidas a grandes cantidades de rayos X procedente de sus estrellas. Las amenazas de Alfa Centauri son múltiples.

Porque los rayos X no solo pueden ser peligrosos para la vida en grandes dosis. Indirectamente, también pueden impedir su aparición al arrancar las atmósferas de los planetas que pueda haber en sus órbitas. Ese destino es, precisamente, el que le sucedió a Marte en el Sistema Solar. A solo 4,3 años-luz, Alfa Centauri es el sistema estelar más cercano. Por eso está considerado uno de los mejores lugares para explorar en busca de señales de vida.

Así que la pregunta de los investigadores tiene todo el sentido del mundo. Suponiendo que tenga planetas a su alrededor… ¿estarían en un entorno que sea favorable para la vida tal y como la conocemos? Hay que recordar que estamos hablando de un sistema estelar triple. Por un lado, tenemos Alfa Centauri A, una estrella de tipo G, muy parecida al Sol. Que orbita junto a Alfa Centauri B, una estrella de tipo K, algo más pequeña y tenue que la nuestra.

Sin observar a Próxima Centauri

Imagen de Alfa Centauri A y B (que aparecen como una única estrella en esta imagen) y Próxima Centauri, que está en la parte derecha y es mucho más tenue.
Crédito: Digitized Sky Survey 2/ Davide De Martin/Mahdi Zamani/ESO

Hay que decir que en este estudio no se dice nada nuevo sobre Próxima Centauri, la tercera estrella del sistema. Se trata de una enana roja que, además, es la más cercana de las tres al Sistema Solar. Ya que está a 4,24 años-luz, es decir, orbita alrededor de Alfa Centauri A y B a unas 10.000 veces la distancia que separa la Tierra del Sol. De Próxima ya sabemos que tiene un entorno que es, probablemente, muy hostil para la vida.

Por eso, el estudio analiza las amenazas de Alfa Centauri A y B, y no tanto de Próxima. Si bien es cierto que sabemos que tiene un planeta a su alrededor, Próxima b, que ha sido objeto de numerosos estudios. Tanto positivos (en relación a la posibilidad de que pueda albergar vida) como negativos. Lo interesante es que el estudio llega a una conclusión positiva sobre Alfa Centauri A y B y sus posibles planetas.

Si alguna de las dos estrellas tiene planetas a su alrededor, tienen una posibilidad muy alta de sobrevivir a la radiación de sus estrellas. Así que la vida podría desarrollarse en el sistema estelar más cercano al nuestro. De momento, la búsqueda de exoplanetas no ha dado resultados positivos. Pero hay que tener en cuenta que la órbita de las dos estrellas es muy pequeña. Así que es más difícil encontrar planetas a su alrededor.

Las amenazas de Alfa Centauri A y B

Concepto artístico del planeta, Próxima b, orbitando alrededor de su estrella, con Alfa Centauri A y B al fondo.
Crédito:
ESO/M. Kornmesser

Para determinar si las estrellas Alfa Centauri A y B tienen condiciones apropiadas para la vida, el observatorio Chandra ha estado observándolas desde 2005. Cada observación ha estado separada por seis meses de diferencia. Chandra es el único observatorio de rayos X que es capaz de distinguir las dos estrellas de forma individual. Así que tiene la capacidad de determinar qué estrella es responsable de cada cosa.

En estas mediciones se ha capturado la evolución de la actividad de rayos X de ambas. Algo similar al ciclo de manchas solares, de 11 años de duración, del Sol. Los datos muestran que cualquier planeta en la zona habitable de Alfa Centauri A recibiría, de media, una cantidad inferior a la de los planetas alrededor del Sol. En cuanto a Alfa Centauri B, la situación sería algo más complicada en comparación al Sol.

Recibirían una cantidad mayor de rayos X. Quizá hasta cinco veces más. Algo que palidece frente a las 500 veces más que recibe Próxima b alrededor de Próxima Centauri. Y 50.000 veces más que lo que puede recibir ese planeta durante una gran llamarada de su estrella. Así que, salvo por Próxima, las amenazas de Alfa Centauri para la vida no parecen muy diferentes a las que podemos ver en el Sistema Solar.

Ayudando a entender el Sol

Concepto artístico de la superficie de Próxima b. En el horizonte se puede ver a Próxima Centauri y, en la lejanía, al sistema binario que forman Alfa Centauri A y B.
Crédito:
ESO/M. Kornmesser

Además de permitirnos comprender mejor la habitabilidad de Alfa Centauri, el observatorio Chandra es muy útil en otro sentido. Su historial de rayos X de las estrellas A y B permite analizar, también, la actividad cíclica del Sol. Algo imprescindible para comprender los peligros espaciales que pueden afectar a la Tierra. Poco a poco, en cualquier caso, seguimos avanzando en la comprensión de otros lugares de la Vía Láctea.

De todos modos, hasta que no descubramos planetas en torno a la zona habitable de Alfa Centauri A o B, el estudio tiene un punto de anécdota. Pero nunca está de más echar un vistazo al sistema estelar más cercano al nuestro. Es el mejor objetivo que podemos escoger para estudiar, porque las dificultades son mucho menores que para estudiar sistemas mucho más lejanos, y no hay que perder la esperanza.

Que no hayamos encontrado nada, todavía, no quiere decir que no haya planetas alrededor de esas estrellas. La búsqueda continuará en los próximos años, y es muy posible que pase mucho tiempo hasta que tengamos una confirmación definitiva de si hay otros mundos, o no, en Alfa Centauri. De haberlos, sería muy interesante, también, al poder estudiarlos dentro de un sistema estelar múltiple, frente al Sistema Solar que solo tiene una estrella.

El estudio es T. R. Ayres; «Alpha Centauri Beyond the Crossroads» publicado en la revista Research Notes of the American Astronomical Society y presentados recientemente en la reunión de la American Astronomical Society. Puede ser consultado en este enlace.

Referencias: Phys