Astrobitácora 1×16 se centra en dos de los grandes misterios del universo, la materia y la energía oscura, que componen el 95% del cosmos. Además, en YouTube, los supervacíos cósmicos reciben toda la atención. Son una de las estructuras más grandes que podemos observar…
Astrobitácora 1×16: Entendiendo la energía y la materia oscura
Resulta extraño pensar que todo lo que vemos en el universo, que está formado por materia bariónica (también llamada materia visible) sea, en realidad, apenas el 5% del total de la energía y masa del universo. Todo lo que podemos ver, por tanto, es apenas una ínfima parte del total del cosmos. Eso quiere decir que nos queda un 95% compuesto por algo que no se conoce bien. Ese algo se divide entre materia y energía oscura. En el caso de la primera, se calcula que supone entre el 25 y el 30% del cosmos. En el de la segunda, del 65 al 70%.
Pero solo se sabe que existen de forma indirecta. Son necesarias para poder explicar por qué el universo es como es. Tomemos el ejemplo de la energía oscura. Su presencia es indispensable para entender por qué el universo no solo se está expandiendo, sino que, además, también está en aceleración. Sin embargo, ¿qué es la energía oscura? Es una pregunta que, a día de hoy, no tiene respuesta. De hecho, es incluso más desconocida que la materia oscura. Dicho de otro modo, lo más abundante en el universo es una absoluta incógnita.
De la materia oscura, en realidad, no se puede decir mucho más. Aporta gravedad adicional, porque, sin ella, las galaxias no deberían ser capaces de mantenerse unidas. Literalmente, si solo tuviésemos en cuenta la gravedad aportada por la materia visible, se deberían haber desintegrado. Cada estrella habría volado en direcciones diferentes… Pero, al menos, en este caso sí hay sospechas sobre qué partícula podría ser la correspondiente con la materia oscura. Sea como fuere, esto, y mucho más, te está esperando en el podcast de esta semana, en iVoox, Spotify, iTunes y aquí mismo:
Astrobitácora 1×16: La cara oculta del universo
YouTube: Los supervacíos cósmicos
Si pudiésemos ver el universo en su escala más grande, observaríamos que tiene un aspecto que recuerda al de un panal de abeja. Por un lado tenemos filamentos galácticos, entre los que se encuentra Laniakea, el hogar de la Vía Láctea. Por otro, tenemos grandes regiones que parecen estar completamente desiertas. Son lo que se conoce como vacíos y supervacíos. En ellos, aunque pudiera parecer que no hay nada, se encuentran, también, galaxias, estrellas, nebulosas… Podemos encontrar lo mismo que en el resto del universo.
Pero están presentes en una densidad mucho menor. Aproximadamente, se calcula que en los vacíos cósmicos hay una décima parte de la materia presente en el resto del universo. Su descubrimiento es, en realidad, bastante reciente. Se produjo hacia la década de 1970. Pero, ¿está nuestra galaxia en uno de esos supervacíos? Lo cierto es que la pregunta no es descabellada. Si se observa el caso de alguna galaxia (que sí está en un supervacío), se calcula que hasta 1960 no habríamos sido capaces de observar ninguna otra galaxia.
Tampoco podemos olvidarnos de la propia evolución futura del universo. Porque, con su expansión y el paso del tiempo, los vacíos se convierten, poco a poco, en la estructura más dominante. Ahora mismo, los filamentos son enormes estructuras que se extienden a lo largo de miles de millones de años-luz. Pero, en el futuro, serán los supervacíos los que ganarán la batalla. Llegará un momento en que esos filamentos se convertirán en algo muy similar a islas… Esto, y mucho más, puedes verlo en el vídeo de esta semana, tanto en YouTube como al principio de este artículo.