En el nuevo programa del podcast, Astrobitácora 1×08, hablamos de cómo será el futuro del Sistema Solar y de la Tierra. Durante los próximos miles de millones de años, la Tierra y el Sistema Solar cambiarán de una forma profunda, debido a la evolución del Sol. Será un lugar muy diferente al que conocemos en la actualidad…
Astrobitácora 1×08: Cómo será la muerte del Sistema Solar
Aunque podría parecer inalterable, el Sistema Solar también envejece. Sin embargo, lo hace a un ritmo mucho más lento que una vida humana. Aproximadamente, cada 1000 millones de años, el Sol aumenta su brillo y su tamaño. Ese cambio provoca, lógicamente, un aumento de temperatura en su entorno. Poco a poco, por ejemplo, la zona habitable se va alejando de la estrella. Eso provocará que la Tierra, en unos 1100 millones de años, perderá sus océanos. Con ellos, desaparecerá la capacidad de nuestro planeta de poder albergar vida.
Tiempo antes, también perderemos uno de los fenómenos más llamativos que podemos observar desde la superficie de nuestro planeta. El último eclipse solar total tendrá lugar, aproximadamente, en unos 600 millones de años. Después, por el movimiento de la Luna, que se aleja unos 3,8 centímetros cada año, su tamaño aparente en el firmamento será menor que el del Sol. Sí seguirá habiendo, sin embargo, tanto eclipses parciales como anulares, que seguirán sucediendo durante el futuro, incluso mucho más allá de la evaporación de los océanos.
En unos 5000 o 6000 millones de años, nuestra estrella entrará en la fase de gigante roja. Será la recta final de la vida del Sol. Con ella, sufrirá grandes cambios. Uno de los más notables será su espectacular aumento de tamaño. Pasará de tener un diámetro de 1 390 000 kilómetros a 300 millones. En ese recorrido, destruirá Mercurio y Venus. Es posible que también llegue a destruir la Tierra y la Luna. Pero esto, y muchas cosas más, las puedes descubrir en el programa, que está disponible en las plataformas habituales: iVoox, Spotify, iTunes y aquí mismo:
YouTube: El ascensor espacial: entre la realidad y la ciencia ficción
Además, como cada semana, en mi canal de YouTube también abordo un nuevo tema. En esta ocasión, se trata del ascensor espacial, un concepto muy popular en la ciencia ficción. Sus ventajas, de poder llevarse a cabo, son numerosas. Especialmente el bajo coste (una vez construido) para poder acceder al espacio. Permitiría una expansión relativamente sencilla a la órbita baja de la Tierra y nuestro entorno más inmediato. Sin embargo, llevarlo a cabo en la realidad no es nada sencillo. Hace falta que cumpla unos requisitos muy especiales.
Por ejemplo, el cable, que conectaría la superficie de la Tierra con su destino, en algún lugar de la órbita geosíncrona (a 35 780 kilómetros de distancia) necesita ser capaz de aguantar su propio peso, y el de la plataforma que transporta material. Al mismo tiempo, tiene que ser un material muy ligero y, también, de fabricación sencilla, porque habrá que disponer de grandes cantidades de material. Así que uno de los grandes escollos es descubrir qué material podría servir para llevar a cabo este tipo de proyecto.
Tampoco hay que olvidarse de otra cuestión que no es menor. ¿Qué hacer en caso de que el ascensor espacial sufra un fallo catastrófico? ¿Qué sucedería si el cable se rompe? Las amenazas son múltiples. Desde las tormentas a la posibilidad de impactos de micrometeoritos o asteroides, hay un cúmulo de factores que podrían provocar la rotura del cable. Además, también se ha planteado construir ascensores espaciales en otros lugares… Todo esto lo puedes descubrir en el vídeo, disponible tanto en el principio del artículo como en YouTube.