Esta semana, en Los mundos del Cosmos 1×14, hablamos de Sirio, la estrella más brillante del firmamento y con una relación muy interesante con nuestra sociedad. En YouTube, además, hablamos del descubrimiento de una posible exoluna volcánica, que tiene muchas probabilidades de ser real…
Los mundos del Cosmos 1×14: La curiosa historia de Sirio
Sirio es la estrella más brillante del firmamento. Conocida desde la antigüedad, está íntimamente ligada a la propia historia del ser humano en diferentes lugares del mundo. Sirio es, en realidad, un sistema binario, compuesto por una estrella, más masiva que el Sol, denominada Sirio A (y es la que vemos en el firmamento) y una enana blanca. Son los restos de una estrella, más masiva que Sirio A, que ha llegado al final de su vida. El sistema se ha estudiado a lo largo de las últimas décadas, buscando comprender cómo es su entorno y lo que podemos encontrar allí.
Así, se ha descartado que haya planetas masivos (en ciertas distancias) o enanas marrones. Sirio, además, es una estrella que tiene una relación muy curiosa con nuestra civilización. En muchas culturas, está asociada con el perro (no hay que olvidar que es la estrella más brillante de la constelación del Can Mayor). En la Antigua Grecia, se consideraba que Sirio podía ser una estrella con consecuencias negativas. Según cómo se elevase sobre el horizonte después de haber permanecido tiempo sin ser visible (algo a lo que se denomina orto o amanecer helíaco).
Quizá una de las historias más interesante es, precisamente, cómo el amanecer helíaco de Sirio ayudó a que los antiguos egipcios pudiesen identificar cuándo llegaban las crecidas del Río Nilo, permitiendo así que se pudiese aprovechar sus orillas para la agricultura. Son solo algunos ejemplos del impacto que una estrella puede tener en nuestra sociedad, especialmente en tiempos inmemoriales. De esto, y mucho más, hablamos en Los mundos del Cosmos 1×14. Puedes escucharlo en la aplicación de iVoox, en iOS y Android, en su web, en este enlace, o aquí mismo:
YouTube: Una posible exoluna volcánica
En YouTube, además, hablamos del posible descubrimiento de una exoluna volcánica. Algo que resulta interesante porque, por primera vez, hay motivos convincentes para pensar que podríamos estar ante una detección sólida de un satélite lejos del Sistema Solar. La principal diferencia, con otras posibles detecciones de exolunas, es que en esta ocasión se trata de un satélite que sería muy similar a Ío, el satélite volcánico de Júpiter. De hecho, es el conocimiento de la actividad de Ío lo que permite entender qué sucede con ese posible satélite…
Los investigadores descubrieron una nube de sodio que, simplemente, no podía tener su origen ni en la estrella ni en el planeta. En su lugar, todo parece apuntar a un satélite alrededor del exoplaneta. Lo que encajaría con algo ya visto aquí en el Sistema Solar. Ío también crea una gran nube de material alrededor de Júpiter. Es algo que resulta interesante porque hasta ahora no se ha logrado confirmar la presencia de una exoluna. Sin embargo, los propios investigadores explican que necesitan investigar más para saber si su detección es realmente buena.
Lo interesante es que, en ocasiones anteriores, la presencia de una posible exoluna solo se había deducido por la curva de luz (cómo varía el brillo) de una estrella cuando un planeta pasa por delante suyo. La presencia de ciertas irregularidades en esa caída de luz podría apuntar a un satélite. Sin embargo, este tipo de detección es tremendamente complicado porque los satélites son todavía más pequeños y tenues que los planetas. De esto, y más, hablamos en el vídeo de esta semana, que puedes ver en YouTube, en este enlace, o al principio de este artículo.