El telescopio James Webb ha obtenido nuevas imágenes de Júpiter, mostrando nuevos detalles del planeta más grande del Sistema Solar y de su entorno. Es una muestra de cómo se puede utilizar el telescopio, también, para estudiar el Sistema Solar y entender nuestro vecindario…
Las nuevas imágenes de Júpiter muestran muchos detalles
Las últimas imágenes de Júpiter, del telescopio espacial James Webb, son muy llamativas. Fueron capturadas el pasado 27 de julio. Al igual que otras imágenes en infrarrojo, han sido coloreadas artificialmente para destacar algunos aspectos específicos. Muestra algunos detalles en los bordes de las bandas coloreadas. También alrededor de la Gran Mancha Roja. Por si no fuese suficiente, proporciona una vista sin precedentes de las auroras en los polos norte y sur del gigante joviano. Una de las imágenes muestra una alineación muy interesante.
Permite observar el planeta, sus tenues anillos y dos de los satélites más pequeños del planeta. Se trata de Amaltea y Adrastea, con algunas galaxias visibles de fondo. Imke de Pater, profesor emérito de la Universidad de California ha dirigido las observaciones con Thierry Fouchet (profesor del Observatorio de París). De Pater explica que nunca se ha visto Júpiter con este detalle. No esperaban que fuesen imágenes tan buenas. Lo cierto es que los detalles de Júpiter y su entorno resultan espectaculares.
En una sola imagen, se pueden ver los anillos, algunos de sus pequeños satélites y hasta algunas galaxias. El equipo de De Pater, Fouchet y el resto de colaboradores han publicado las imágenes como parte del programa Early Release Science del telescopio. No solo se puede apreciar la Gran Mancha Roja. Hay muchos otros sistemas tormentosos, vistos como pequeños óvalos pálidos. También se pueden ver pequeñas columnas de nubes de partículas. A todo esto le podemos sumar los flujos zonales y los patrones de vórtices caóticos en latitudes altas.
Una nueva perspectiva para estudiar Júpiter
Son detalles de Júpiter que se pueden ver con mucha facilidad gracias al telescopio James Webb. Muchas de estas características ya eran conocidas, pero el nuevo observatorio de la NASA, que lo estudia en infrarrojo, proporciona una nueva perspectiva. La combinación de imágenes y espectro, en infrarrojo cercano y medio, permite estudiar la relación entre las dinámicas, la química y la estructura de la temperatura en, y sobre, la Gran Mancha Roja y las regiones aurorales. El instrumento NIRCam ha demostrado una vez más su capacidad.
Al observar Júpiter, sus anillos y dos de sus satélites, demuestra su sensibilidad y capacidad de observación. Muestra ondas brillantes, remolinos y vórtices en la atmósfera de Júpiter. Al mismo tiempo, es capaz de capturar algo mucho más tenue como el sistema de anillos. Para ponerlo en perspectiva, son 1 millón de veces más tenues que el planeta. A esto le sumamos los satélites Amaltea y Adrastea, de 200 y 20 kilómetros, respectivamente. la imagen, explica Fouchet, resume algunas de las cosas que se pueden estudiar en el sistema de Júpiter.
Las imágenes han sido procesadas con la ayuda de Judy Schmidt, científica ciudadana que ha trabajado con las imágenes del telescopio Hubble durante una década. También ha participado Ricardo Hueso, que estudia atmósferas planetarias en la Universidad del País Vasco. Hueso es uno de los investigadores que forma parte del programa Early Release Science (ERS) y está liderando las observaciones de la atmósfera de Júpiter con NIRCam.
Lo que queda por venir con Júpiter
Judy Schmidt ha procesado multitud de imágenes astronómicas (su gran pasión). Algo que la ha llevado a procesar imágenes de nebulosas, cúmulos globulares, regiones de formación de estrellas y otros objetos. Las observaciones de Júpiter del telescopio James Webb están resultando muy atractivas. La cantidad de detalles es apabullante y permite confirmar que el telescopio también puede ser una gran herramienta en el estudio del Sistema Solar. Por delante queda mucho trabajo. Esto es solo un aperitivo de las observaciones del gigante joviano.
Más adelante, en lo que queda de año, las auroras de Júpiter serán analizadas. Se realizarán observaciones espectroscópicas. Algo que ya se ha hecho con la Gran Mancha Roja. El 27 de julio, fue el turno de las observaciones en infrarrojo cercano. El 14 y 15 de agosto, fue para la longitud de infrarrojo medio. Las observaciones de la Gran Mancha Roja son un proyecto conjunto del equipo ERS (con de Pater y Fouchet como investigadores principales) y un programa de observaciones del Sistema Solar. Este último ha sido desarrollado por Heidi Hammel.
Pertenece a la Asociación de Universidades para la Investigación en Astronomía (AURA, por sus siglas en inglés). Las observaciones de Júpiter las ha liderado Leigh Fletcher, profesor en la universidad de Leicester, Inglaterra. En definitiva, podemos esperar ver más imágenes de Júpiter, a través de los ojos de James Webb, en lo que queda de 2022. El planeta más grande del Sistema Solar ya estaba bien conocido, pero con esta nueva herramienta se puede profundizar todavía más en sus particularidades. ¿Qué sorpresas nos deparará?
Referencias: Universidad de Berkeley