Un grupo de investigadores plantea el uso de algo a lo que denominan músculos de burbujas como posible solución a los inconvenientes de un viaje a Marte. Su concepto podría ser una alternativa viable para poder llevar seres humanos al planeta rojo sin que su musculatura se resienta mucho…

Músculos burbuja para viajar a Marte

Marte es un planeta que presenta muchos desafíos. Entre ellos, uno que destaca es el de tener que trabajar y moverse en una gravedad que solo es el 37% de fuerte que la de la Tierra. Tras pasar meses en la ingravidez del espacio, los músculos y huesos de los astronautas estarán debilitados y tendrán dificultades para enfrentarse incluso a esa gravedad reducida. Por ello, un grupo de investigadores plantea una solución que parece muy prometedora. Se trata de un exotraje que los astronautas podrían llevar y que tiene «músculos de burbujas» hinchables.

El astronauta Satoshi Furukawa, de JAXA, pedaleando en el sistema CEVIS. Crédito: NASA

Generalmente, se plantea que una misión tripulada típica a Marte implicará unos 1000 días de viaje. De ellos, el 40% tendrán lugar en microgravedad, durante el viaje entre ambos planetas. En ese tiempo, gracias a lo aprendido en la Estación Espacial Internacional, se sabe que los astronautas pueden perder mucha masa muscular. Hasta un 20% por mes. La densidad de los huesos también disminuye entre un 1 y 2% por mes. Cuando finalmente lleguen a Marte, los astronautas tendrán que levar a cabo trabajos muy exigentes.

Tendrán que levantar equipo pesado y caminar grandes distancias, pero con cuerpos que se habrán visto muy debilitados por un vuelo espacial tan largo. En la actualidad, una solución para mitigar este impacto es llevar a cabo una rutina diaria de ejercicio de unas dos horas. Los astronautas de la Estación Espacial Internacional lo hacen para poder mantenerse en buena forma. Sin embargo, no deja de ser un mecanismo que solo proporciona una protección limitada. Hace falta una solución mucho más robusta que permita mitigar estos inconvenientes.

El uso de exoesqueletos

Ya se había planteado utilizar exoesqueletos robóticos rígidos como una alternativa. Sin embargo, son pesados, muy voluminosos y difíciles de integrar con los trajes espaciales. Por ello, un grupo de investigadores de la universidad de Bristol ha planteado una solución diferente. Utilizan algo a lo que llaman «músculos artificiales de burbujas». Son actuadores neumáticos, ligeros, que se contraen al inflarse con aire. Algo similar a los manguitos que se pueden utilizar en una piscina, pero mucho más sofisticados, diseñados para dar una asistencia muscular precisa.

Tres de estos músculos de burbujas funcionan conjuntamente para ayudar a los astronautas a flexionar las rodillas mientras caminan. Al inflarlos, se contraen y proporcionan una fuerza extra para ayudar al movimiento de la pierna. Así, se compensa la musculatura debilitada de los astronautas mientras se mantiene un patrón de movimientos natural al caminar. Los investigadores han conseguido una pierna robótica sofisticada para simular el caminar con la gravedad de Marte, y probaron el rendimiento de su exotraje en este entorno.

Los resultados fueron muy prometedores. El dispositivo logró aumentar el ángulo máximo de flexión y la velocidad del movimiento de la pierna. Además, y todavía más importante, no interfirió con el ritmo natural del caminar. Algo muy importante para que tenga una aplicación útil en el mundo real. El sistema resulto ser más efectivo a la hora de proporcionar asistencia durante partes más largas del ciclo de caminar. Demostrando así que podría ayudar a restaurar patrones de movimiento más similares a los de la Tierra en el planeta rojo.

Los músculos de burbujas también tendrían otros usos

Lo más interesante es que este exotraje se ha diseñado para la exploración espacial, pero podría tener otros usos. La tecnología podría tener aplicaciones significativas en nuestro propio planeta. Los exotrajes de músculos de burbujas son ligeros y esto hace que sean candidatos ideales para ayudar a las personas que tengan problemas de movilidad. Ofrecería una alternativa más cómoda y natural frente a los soportes mecánicos rígidos. La investigación es un paso importante hacia convertir las misiones espaciales de larga duración en una realidad.

Concepto artístico de una posible planta de terraformación en Marte. Crédito: National Geographic Channel

El uso de estos exotrajes podría garantizar que, cuando los seres humanos pongan un pie en Marte, tendrán la ayuda tecnológica necesaria para explorar y trabajar de manera efectiva en otro planeta. Además, sería una buena manera de simplificar uno de los grandes riesgos de un viaje tan largo. Después de meses en el espacio, la tripulación que llegue al planeta rojo tendrá que ser capaz de valerse por sí misma. La ayuda de exotrajes como el planteado en este estudio permitirían que la tripulación pueda funcionar con normalidad.

El hecho de que pueda llegar a aplicarse también en la Tierra, para personas que tengan su movilidad limitada o afectada, es otra forma de beneficiarse de los avances de la exploración espacial. Todavía habrá que esperar mucho tiempo hasta que veamos una misión tripulada al planeta rojo, pero, al igual que en otros campos, ya se está avanzando para que, llegado el momento, pueda convertirse en realidad con todas las garantías. Ahora, naturalmente, el próximo paso es ver si este exotraje llegará a convertirse en una realidad…

Estudio

El estudio es E. Puvirenti, R. Diteesawat, A. Stinchcombe et al.; «Advancing space health: Towards a soft wearable hypogravity exosuit for enhanced mobility in Martian conditions«. Publicado en la revista Acta Astronautica el 3 de junio de 2025. Puede consultarse en este enlace.

Referencias: Phys