SpaceX ha anunciado que ya tiene fecha para el octavo vuelo de prueba de Starship. Será una oportunidad para ver si, en esta ocasión, la compañía de Elon Musk consigue que Starship complete con éxito su vuelo orbital, después de que fuese necesario destruirla en el séptimo vuelo…
El octavo vuelo de prueba de Starship tendrá lugar el 3 de marzo
Este 3 de marzo, a partir de las 17:30 (en horario local de Texas, 00:30 del 1 de marzo en la Península Ibérica), SpaceX llevará a cabo el octavo vuelo de prueba de Starship, siempre y cuando no haya ningún imprevisto y las condiciones meteorológicas permitan llevarlo a cabo. La compañía ha explicado que ya ha completado la investigación sobre qué provocó que se perdiese Starship poco después de comenzar el séptimo vuelo de prueba. Desde entonces, se han realizado varios cambios en el hardware y el funcionamiento para aumentar la fiabilidad de la fase superior.

El próximo vuelo tendrá como objetivo todo aquello que no se logró en el anterior. Es decir, se probará el despliegue de carga en el espacio y diferentes experimentos de reentrada, que buscarán como objetivo preparar la fase superior (Starship) para regresar a la plataforma de lanzamiento y atraparlo. El vuelo también incluirá el lanzamiento, retorno y atrapado de la primera fase, SuperHeavy. En el séptimo vuelo se aplicaron muchas mejoras a Starship, centrándose en la fiabilidad y el rendimiento en todas las fases del vuelo.
Los alerones delanteros han sido mejorados para reducir significativamente su exposición al calor en la reentrada, mientras se simplifica el mecanismo subyacente y las losetas de protección. También se ha rediseñado el sistema de propulsión, incluyendo un aumento del 25% en el volumen de propelente en comparación a las generaciones anteriores de Starship. SpaceX explica que esto da más rendimiento al vehículo y la capacidad de realizar vuelos de más larga duración. El sistema de aviónica también se ha rediseñado por completo.
Un vuelo que tendrá objetivos muy definidos
Las mejoras de aviónica buscan darle más capacidad y redundancia para misiones más complejas, como transferencia de combustible y el regreso de Starship al lugar de lanzamiento. Durante el vuelo de prueba, Starship desplegará cuatro simuladores de Starlink. Tienen un tamaño similar a los satélites Starlink de nueva generación, como el primer ejercicio de una misión de despliegue de satélites. Los simuladores de Starlink estarán en la misma trayectoria suborbital de Starship y, por tanto, se espera que se desintegren al reentrar en la atmósfera de la Tierra.
Mientras la nave permanezca en el espacio, también tendrá lugar el reencendido de un motor Raptor. El vuelo de prueba incluye varios experimentos centrados en permitir que Starship pueda volver al lugar de lanzamiento. También han retirado una cantidad importante de losetas para estresar las zonas más vulnerables del vehículo. La compañía va a probar diferentes opciones de losetas metálicas, incluyendo una con enfriamiento activo. Servirá para comprobar materiales alternativos que protejan a Starship durante su reentrada.
En los laterales del vehículo, se han instalado versiones no estructurales de los soportes de atrapado de Starship, para comprobar cómo rinden desde el punto de vista térmico, junto a una sección de la línea de losetas que tendrá un borde cónico suavizado para corregir los puntos calientes observados en el sexto vuelo de prueba. El perfil de reentrada de la nave ha sido diseñado para estresar, intencionadamente, los alerones traseros de la nave y comprobar sus límites durante el punto de máxima presión dinámica durante la entrada.
SuperHeavy también incorpora mejoras
Además, SpaceX explica que se probarán diferentes sensores de radar en la torre de lanzamiento y los brazos metálicos de atrapado con el objetivo de aumentar la precisión a la hora de medir distancias entre los brazos y un vehículo en retorno. SuperHeavy cuenta con diferentes mejoras para este séptimo vuelo de Starship. Un sistema de aviónica mejorado (con un ordenador de vuelo más potente)…

Así como una mejor distribución de red y energía, y la inclusión de baterías inteligentes integradas. Para poder intentar el atrapado de SuperHeavy, es necesario que se cumplan diferentes criterios tanto en el vehículo como en la plataforma. Por lo que es imprescindible que los sistemas del cohete y la torre estén en buen estado, además de un comando final, enviado manualmente por el director de vuelo de la misión. Si el comando no se enviase antes del encendido de retorno, o si las comprobaciones automáticas muestran condiciones inaceptables, SuperHeavy no regresará a la torre.
En su lugar, utilizará su trayectoria por defecto para posarse suavemente en el Golfo de México. La compañía explica que sigue este criterio para garantizar la seguridad del público y su equipo. SuperHeavy solo regresará si las condiciones son apropiadas. La ventana de lanzamiento comenzará a las 17:30 (hora de Texas) y SpaceX comenzará su retransmisión 40 minutos antes del lanzamiento. También lo seguiremos en directo en Twitch, como es habitual en los lanzamientos de prueba de Starship. Veremos qué sucederá en este nuevo intento…
Actualización del 27 de febrero: Artículo actualizado para reflejar que la nueva fecha de lanzamiento es el lunes, 3 de marzo (a la misma hora).
Referencias: SpaceX