Esta semana, en las Joyas del Sistema Solar 1×15, hablamos de los cometas, los objetos que, en ocasiones, pueden ser lo más espectacular del Sistema Solar. Además, en YouTube, hablamos de los siete minutos de terror. Algo por lo que pasan las misiones que aterrizan en Marte…

Las Joyas del Sistema Solar 1×15: Los cometas

El Sistema Solar está compuesto por billones de objetos. Entre ellos, uno de los tipos más interesantes e intrigantes es el de los cometas. Estas rocas heladas pueden haber sido una pieza imprescindible para, por ejemplo, permitir que la Tierra tenga vida. Pudieron ser los responsables de traer la mayor parte del agua de los océanos. También pudo ser el mecanismo que trajo los bloques de la vida. Es decir, desde el punto de vista astronómico, y el origen de la vida, son tremendamente interesantes. Pero hay otro aspecto más…

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Imagen del cometa Tempel 1 momentos después de la colisión de la sonda Deep Impact. Crédito: NASA

Los cometas nos dejan, en ocasiones, imágenes espectaculares en el firmamento de nuestro planeta. Han sido observados desde tiempos inmemoriales. Por ello, no resulta ninguna sorpresa saber que hay registros de sus observaciones desde la antigüedad. La relación del ser humano con estos objetos ha sido de lo más llamativa. En muchos momentos, se consideraba que su aparición era una señal nefasta. Podían indicar, creían, la llegada de catástrofes, tanto naturales como provocadas por el ser humano (como guerras) o la muerte de reyes o nobles…

De cuando en cuando, algunos cometas son mucho más espectaculares que el resto. Se trata de los grandes cometas, que no dejan indiferente a nadie, porque son fácilmente observables. Todo esto es solo parte de lo que repasamos en esta entrega. También hablamos de la estructura de los cometas, de sus particularidades, de los tipos de cometas que conocemos y un largo etcétera. Como siempre, puedes escuchar el episodio 1×15 de las Joyas del Sistema Solar en la app de iVoox, en Android o iOS. O, si lo prefieres, en su web y aquí mismo:

YouTube: Los siete minutos de terror de Marte

Además, como cada semana, en YouTube, hablamos de un nuevo tema. En esta ocasión, centramos la atención en Marte. La inminente llegada del róver Perseverance es una buena oportunidad para hablar del proceso de aterrizaje. La secuencia fue denominada por la NASA, hace unos años, los siete minutos de terror. Es el tiempo, aproximadamente, que dura el descenso hasta la superficie del planeta rojo. El proceso es completamente automatizado, ya que no hay nada que hacer desde la distancia, debido a la distancia que nos separa del planeta rojo.

Esta imagen de la atmósfera de Marte fue tomada por la sonda Viking 1 en junio de 1976. Crédito: NASA/Viking 1

En realidad, para cuando en la Tierra se reciba la señal de que ha iniciado el descenso a Marte, allí ya hará unos minutos que todo habrá acabado. Es una consecuencia del hecho de que la velocidad de la luz sea finita. En estos momentos, hay un retraso de unos 11 minutos. Eso imposibilita poder tomar medidas en tiempo real. Por lo que lo único que se puede esperar es haber hecho el trabajo bien y que todo transcurra sin complicaciones. Marte tiene una atmósfera que resulta de lo más fastidioso. Tiene el espesor adecuado para ser un problema…

En la Luna, sin atmósfera, basta con usar propulsores hasta llegar a la superficie. En la Tierra, con una atmósfera densa, es suficiente con usar un escudo térmico y paracaídas. Marte, sin embargo, tiene una atmósfera lo suficientemente densa como para necesitar un escudo térmico. Pero no tanto como para que el uso de un paracaídas baste para llegar a la superficie de forma segura. Por ello, también hay que usar propulsores… Todo esto, y más, te espera en el vídeo de esta semana. Puedes verlo al principio del artículo o en el canal de YouTube, en este enlace.