El brillo de Betelgeuse se ha incrementado en un 50% y, naturalmente, ha comenzado la especulación sobre qué podría suceder. A fin de cuentas, explotará como supernova en algún momento. Pero ¿cuándo podría ser? Un grupo de investigadores ha intentado obtener la respuesta.
El brillo de Betelgeuse aumenta un 50% pero no implica una supernova inminente
Es importante tener presente que Betelgeuse es una estrella muy masiva, mucho más que el Sol. Además, está al final de su vida y terminará explotando como supernova. Por tanto, cada vez que se produce algún cambio en su brillo, la atención se centra inmediatamente en comprender si está podría ser la ocasión en que, finalmente pueda suceder. Hay que destacar, sin embargo, que la explosión de Betelgeuse es inminente, pero solo en la escala cósmica. Se suele calcular que podría tener lugar en los próximos cien mil años.
Betelgeuse es, además, una estrella variable. Es decir, su brillo sufre cambios de manera relativamente regular, si bien la intensidad de esos cambios no siempre es la misma. Así, se ha descubierto que tiene un ciclo de 400 días, en los que su brillo cambia. A ese hay que unirle otros tres, de 125 días, 230 y 2200. Algo que hace muy difícil entender cómo se está comportando la estrella o en qué punto se encuentra. Hace unos años, además, su brillo descendió drásticamente y se sugirió que podía ser una señal del final de su vida.
Sin embargo, se entendió que solo era consecuencia de material, expulsado por la propia estrella, que formó una densa nube en la dirección del Sistema Solar. Ahora, su espectacular aumento de brillo está atrayendo mucha atención, y un grupo de investigadores ha querido entender qué puede implicar toda esta actividad. En su trabajo, explican que la supernova podría producirse mucho antes de lo que se suele decir. Si bien no quiere decir, ni mucho menos, que necesariamente vaya a producirse en el curso de nuestras vidas.
La breve vida (en la escala astronómica) de Betelgeuse
Betelgeuse es una estrella que hace tiempo que terminó su fase de secuencia principal (en la que está el Sol, por ejemplo, fusionando en helio el hidrógeno que acumuló durante su formación). La estrella tiene solo entre 8 y 8,5 millones de años pero ya está en las últimas etapas de su vida (las estrellas más masivas pasan por cada etapa mucho más rápido). Por lo que su tamaño es mucho mayor de lo que lo era cuando se trataba de una estrella de secuencia principal. La gran pregunta, sin embargo, es en qué punto se encuentra de esa recta final.
En el estudio, los investigadores explican que, pese a la poca distancia de Betelgeuse del Sistema Solar, ha sido difícil delimitar lo lejos que está, su luminosidad, radio y la masa que tiene en la actualidad, así como cuando estaba en secuencia principal. Así como otros factores sobre su estructura interna. Explican que, especialmente, la masa en la fase de secuencia principal es un factor crítico para entender cuánto tiempo de vida le queda. Si bien no es el único factor clave para poder determinar cuándo podría producirse su explosión en supernova.
En el estudio se plantean algunas posibilidades, al combinar observaciones y diferentes modelos por ordenador. A pesar de que los investigadores son muy precavidos, hay un punto de su estudio que ha llamado mucho la atención. En un gráfico, mencionan que el núcleo explotará en solo unas décadas, al agotarse el carbono en el interior de Betelgeuse. Aunque, evidentemente, es algo que puede resultar tremendamente atractivo. Lo cierto es que se está pasando por alto otra parte del trabajo en el que se pone en perspectiva lo que se está planteando.
El aumento de brillo de Betelgeuse en un 50% no se puede asociar a una fase concreta
No es posible, explican, determinar en qué punto está Betelgeuse de sus últimas evoluciones. En la recta final, las condiciones en su superficie apenas cambian, y es lo único que se puede examinar desde la distancia. Según las observaciones, datos y modelos, cabe la posibilidad de que Betelgeuse pueda explotar antes de lo previsto. Sin embargo, no pueden asegurar en qué etapa se encuentra, y la fusión de carbono podría durar mucho tiempo. De hecho, es incluso más complejo. No todo el mundo está de acuerdo en que Betelgeuse ya esté fusionando carbono.
Otros consideran que todavía está en la fase de fusión de helio (es la primera tras la fusión de hidrógeno y es muy duradera). El razonamiento no es ni mucho menos descabellado. Sus cambios de brillo son perfectamente explicables también en esa fase, y siendo más duradera resulta más probable que sea el momento de su vida en el que la vemos, frente a otras más breves. De lo que no hay dudas es de que su vida terminará como una supernova. A diferencia de otras, no producirá una ráfaga letal de rayos gamma, como otros astros.
Expulsará mucho material y radiación de rayos X y ultravioleta, pero la Tierra está demasiado lejos como para verse afectada. Será un espectáculo visual y un gran cambio en la constelación de Orión. Tras ella, quedará una estrella de neutrones. Cuando se convierta en supernova, todo el proceso será estudiado con gran detalle y será una oportunidad única en el estudio del firmamento. Pero, para bien o para mal, lo cierto es que el aumento de brillo de Betelgeuse no es un preludio a su inminente final en una supernova espectacular…
Estudio
El estudio es H. Saio, D. Nandal, G. Meynet y S. Ekstöm; «The evolutionary stage of Betelgeuse inferred from its pulsation periods». Está disponible para su consulta en arXiv, en este enlace.
Referencias: Universe Today