Las páginas web de NASA han retirado las referencias al aterrizaje de la primera mujer en la Luna como parte de los objetivos del programa Artemisa. Desde el pasado viernes, tal y como informan diversos medios estadounidenses, las páginas actualizadas del programa ya no contienen esta mención…
¿Qué significan estos cambios en la web de NASA?
Si visitamos las páginas web de NASA referentes al programa Artemisa, veremos que ya no hay menciones de la afirmación (en inglés) «NASA enviará a la primera mujer, primera persona de color y primer astronauta internacional a la Luna con tecnologías innovadoras para explorar más parte de la superficie lunar que nunca antes». Este cambio llega como consecuencia del movimiento de la administración de Trump, que ha utilizado las órdenes ejecutivas para eliminar las páginas de diversidad, igualdad e inclusión de todas las páginas web federales.

Lo más curioso es que el anuncio de NASA para enviar a la primera mujer a la Luna llegó, precisamente, en el marco de la primera presidencia de Donald Trump. Ahora, las páginas del programa Artemisa simplemente mencionan que «Artemisa II se apoyará en el vuelo de prueba de Artemisa II, añadiendo nuevas capacidades con el sistema de aterrizaje tripulado y trajes espaciales avanzados, para enviar a los primeros seres humanos a explorar la región del Polo Sur de la Luna». Por ahora, el programa Artemisa solo cuenta con una misión realizada.
Se trata de Artemisa I, que viajó a la Luna en 2022 sin tripulación. Sirvió para poner a prueba los sistemas de la cápsula Orión y verificar que está preparada para enviar a seres humanos en una misión tripulada posterior. El siguiente paso es la misión Artemisa II que, de momento, sigue planeada para no antes de abril de 2026. Esa tripulación, que sobrevolará la Luna, pero no aterrizará en ella, es muy variada. Viajará una mujer, así como una persona de color, un astronauta internacional y un cuarto astronauta estadounidense.
La tripulación de Artemisa II ya está anunciada
Específicamente, los integrantes son Christina Koch (primera mujer), Victor Glover (primera persona de color) y Reid Wiseman, todos ellos de NASA. El otro integrante es Jeremy Hansen, astronauta canadiense (de la Agencia Espacial de Canadá). El primer aterrizaje tripulado en la Luna, desde la misión Apolo 17 en 1972, será de la misión Artemisa III, siempre que no haya cambios. La tripulación todavía es un misterio y la fecha de esa misión está prevista para algún momento del verano de 2027. Habrá que ver qué sucede con esta misión.
Porque, durante la primera presidencia de Donald Trump, el entonces administrador de NASA, Jim Bridenstine, dijo que no le sorprendería que la tripulación de esa misión fuese íntegramente femenina. La declaración de que la primera persona de color llegaría en una futura misión del programa Artemisa tuvo lugar tras la elección de Joe Biden como presidente. Sin embargo, NASA no llegó a explicar si esa persona estará en la misión Artemisa III o se unirá en una misión posterior. De los 24 astronautas que han viajado a la Luna, 12 han caminado en su superficie.
Todos ellos han sido hombres blancos. NASA ya ha experimentado diferentes cambios bajo las órdenes de Trump, incluyendo la eliminación de la Oficina de Diversidad y Oportunidad Igual. Aunque ya no hay conexión alguna con el programa de Diversidad, Igualdad e Inclusión, todavía se pueden ver menciones de «inclusión» en las páginas web dedicadas a las oportunidades laborales en la NASA. Es posible que esto suponga una declaración de intenciones (y un cambio profundo en las políticas de la agencia en este sentido) o que quede en anécdota.
Mucha incertidumbre por delante en cuanto a NASA en general
Al margen de lo que suceda con Artemisa III, lo cierto es que son momentos de gran incertidumbre para la agencia espacial más famosa del mundo. La NASA todavía no tiene un nuevo administrador. El elegido de Trump es el multimillonario Jared Isaacman, que ha volado en dos ocasiones al espacio (en el marco de las misiones privadas Inspiration4 y Polaris Dawn, que él mismo financió). De él, si se confirma la elección, dependerá la decisión sobre el futuro del programa Artemisa. Es posible que, incluso, decida cancelar el programa.

Algo que, aunque puede parecer radical, estaría justificado por el impulso que Elon Musk quiere dar a la exploración espacial tripulada de Marte. No es ningún secreto que el multimillonario, propietario de SpaceX y ahora también consejero de Trump, anhela construir una ciudad en Marte. Además, uno de los grandes objetivos de la administración de Trump es reducir costes en todos los ámbitos. El programa Artemisa es uno de los más caros de la agencia espacial. Su cohete, llamado SLS, no es reutilizable y es tremendamente caro.
Por ello, puede que los cambios en el programa Artemisa se reduzcan, simplemente, a desechar el SLS y utilizar, en su lugar, Starship. O, por el contrario, Isaacman podría optar por centrar los esfuerzos de la agencia, en cuanto a exploración espacial tripulada se refiere, en lograr enviar una misión a Marte. Si se cumpliese este último escenario, entonces la NASA tendría que comenzar de cero. Algo que implicaría retrasar considerablemente las misiones tripuladas que pueda llevar a cabo próximamente. Veremos en qué termina todo esto…
Referencias: Phys