La medicación utilizada por los astronautas, en la Estación Espacial Internacional, podría ser un problema en misiones más largas. Por ejemplo, en un viaje de tres años de duración a Marte. Un nuevo estudio muestra que más de la mitad de medicinas, almacenadas en una misión así, caducarían demasiado rápido…
No tener medicación a mano en una misión podría ser un gran problema
Analgésicos, antibióticos, antialérgicos, somníferos… son medicamentos que podemos encontrar en una misión espacial. Ninguna resulta particularmente extraña o sorprendente. Sin embargo, los investigadores explican que la mayoría caducarían antes de que los astronautas regresasen a la Tierra. Por lo que los astronautas, en una misión de larga duración, podrían verse obligados a depender de medicación poco efectiva o incluso dañina, según se plantea en este trabajo. En realidad, los autores explican que no quiere decir que la medicación no vaya a funcionar.
Simplemente, al igual que sucede en nuestras casas, no debemos tomar medicación caducada. Las agencias espaciales tendrán que tener en cuenta que esa medicación caducada será mucho menos efectiva. En algunos casos, la medicación que se ha pasado de fecha puede perder un poco de su efectividad. Otros medicamentos, sin embargo, pierden mucho más. La estabilidad, y potencia, de los diferentes medicamentos (al usarlos en el espacio, en comparación a la Tierra) sigue siendo algo muy desconocido. El duro entorno del espacio es un factor que tener en cuenta.
La radiación podría reducir la efectividad de esos medicamentos. En misiones que sean suficientemente largas, puede ser todo un obstáculo a la hora de garantizar el éxito de la misión. Los investigadores solicitaron acceso a la información sobre los medicamentos disponibles en la Estación Espacial Internacional. Su razonamiento es que, seguramente, la NASA utilizará medicación similar en una misión que tenga Marte como destino. Con la ayuda de una base de datos internacional (sobre fechas de caducidad de medicamentos) se pusieron manos a la obra.
Muchos medicamentos tienen una duración muy corta (para una misión)
Así, los investigadores han determinado que, de los 91 medicamentos disponibles, 54 tienen una vida útil de 36 meses o menos. Usando las estimaciones más optimistas, alrededor del 60% de estos medicamentos expirarían antes de que terminase una misión al planeta rojo. Si se utiliza una estimación más pesimista, la cifra se dispara hasta el 98%. El estudio no ha planteado que esa medicación se pueda degradar de una manera rápida. En su lugar, se ha centrado en la incapacidad de dar nuevos suministros a una misión que vaya al planeta rojo.
Por lo que, naturalmente, no hay manera de poder proporcionar nuevos medicamentos. Esta falta de suministros no solo afecta a la salud. También es un factor muy importante para otros suministros críticos, como la comida. Una posible solución sería aumentar la cantidad de medicación a bordo. Algo que podría ayudar a compensar esa eficacia más reducida de las medicinas caducadas. El mensaje, en realidad, es claro. Los investigadores explican que los responsables de la salud, de estas misiones, tendrán que buscar soluciones.
Será necesario encontrar maneras de alargar la fecha de caducidad de esos medicamentos hasta cubrir los tres años que se espera que dure una misión tripulada a Marte. También tendrán que seleccionar medicinas con una vida mucho más larga o, simplemente, aceptar los riesgos más elevados relacionados con el consumo de medicamentos caducados. En estudios anteriores (y experiencias) se ha observado que los astronautas pueden enfermar en la Estación Espacial Internacional. Sin embargo, la situación allí no es dramática.
La medicación no es un problema si estamos cerca de la Tierra
Los beneficios de la Estación Espacial Internacional son muchos. Por ejemplo, la comunicación entre la estación y los equipos en tierra se realiza en tiempo real. El laboratorio orbital recibe nuevos suministros de manera regular, por lo que cualquier pequeña lesión, o enfermedad menor que pueda surgir, se trata con facilidad. Son pequeños incidentes que nunca llegan a afectar al desarrollo de la misión. El problema está cuando nos encontramos en un entorno diferente, en una nave que viaja hasta Marte y con suministros limitados.
Hay que recordar que las comunicaciones, en este tipo de misiones, no serán en tiempo real. Si no se dispone de la medicación necesaria (que no haya caducado), incluso una pequeña lesión o una enfermedad que, a priori, debería ser poco importante, puede convertirse en un quebradero de cabeza muy serio. Uno de los aspectos en los que más se está poniendo la atención, en estos momentos, es precisamente, cómo garantizar la supervivencia y bienestar de la tripulación. Algo que se está acometiendo desde diferentes frentes.
Por ejemplo, han sido varios los estudios publicados sobre salud mental. ¿Cómo reacciona un grupo de personas que tiene que pasar mucho tiempo junta en un espacio muy reducido? ¿De qué manera rinde un equipo que se encuentra aislado, por el retraso en las comunicaciones, de la Tierra? Este tipo de preguntas y proyectos resultan muy útiles porque ayudan a comprender mejor los riesgos y retos (como el problema que supone la medicación) que hay que superar para que una misión a Marte se pueda llevar a cabo con éxito. Hay que recordar que, en cualquier caso, no se espera que suceda hasta la década de 2040…
Estudio
El estudio se publicará en la revista npj Microgravity (pero no estaba disponible en el momento de escribir este artículo).
Referencias: Phys