Las Pléyades han sido fuente de innumerables historias desde hace mucho tiempo. Su presencia en el firmamento nos resulta muy familiar, y así sucedió ya en la antigüedad. Puede que las historias más antiguas, contadas por el ser humano, sean, precisamente, las de estas estrellas…

Las historias de las Pléyades pueden ser muy antiguas

El cúmulo abierto de las Pléyades es una de las imágenes más familiares del cielo de diciembre en el hemisferio norte. Es popularmente conocido, en muchos lugares del mundo, como las siete hermanas. Pero, si se observa detenidamente, veremos que en realidad contiene seis estrellas. ¿Qué pasó con la séptima? ¿Por qué se le llama así? Muchas culturas, a lo largo y ancho del mundo, cuentan historias bastantes similares sobre las siete hermanas. Se ha mencionado que, quizá, las primeras historias sobre las Pléyades pudieron originarse hace 100 000 años.

Las viejas historias de las Pléyades
La constelación de Orión, con Betelgeuse fácilmente reconocible en la parte superior izquierda. Crédito: Deep Sky Colors/Rogelio Bernal Andreo

En aquel momento, la constelación tenía un aspecto muy diferente al que podemos observar en el presente. En la mitología griega, las Pléyades eran las siete hijas del titán Atlas. Fue obligado a mantener el cielo durante toda la eternidad, impidiendo que pudiese proteger a sus sus hijas. Así que, para evitar que fuesen violadas por Orión, el cazador, Zeus las transformó en estrellas. La historia dice, sin embargo, que una hermana se enamoró de un mortal y decidió ocultarse. Por eso, en el firmamento, solo podemos observar seis estrellas.

Otra historia parecida se cuenta entre los grupos aborígenes de Australia. En muchas de sus culturas, son un grupo de chicas jóvenes, generalmente asociadas con ceremonias sagradas e historias de mujeres. Las Pléyades, además, son parte importante de los calendarios y la astronomía aborígenes. En algunos grupos, de hecho, su primera aparición en el cielo del atardecer marca la llegada del invierno. No muy lejos de las Pléyades está la constelación de Orión. En la mitología griega, era un cazador. También muchas otras culturas…

Las historias de la hermana perdida de las Pléyades

Sucede así en las culturas aborígenes, donde es un cazador o, en algunos casos, un grupo de hombres jóvenes y fuertes. En la región central de Australia, Orión es representado como un cazador de mujeres. Específicamente, de las mujeres que se encuentran en la constelación de las Pléyades. Muchas historias aborígenes dicen que los hombres, o el cazador, en Orión persigue a las siete hermanas. Una de ellas, según la versión, ha fallecido, está oculta, es muy joven o ha sido secuestrada, por lo que solo seis son visibles.

Concepto artístico del satélite Gaia. Crédito: ESA/ATG Medialab

En las culturas europeas, africanas, asiáticas, indonesias y nativas de América, muchas culturas entienden que el cúmulo tiene siete estrellas pero solo seis son visibles. Así, dan lugar a una historia que explica por qué la séptima es invisible. Pero, ¿cómo es posible que se de esa similitud en historias tan lejanas, y dispares, como las de Grecia y los aborígenes australianos? Los antropólogos creían que los europeos pudieron llevarse la historia a Australia. Allí, los aborígenes la adoptaron con su propia versión. Pero esas historias son mucho más antiguas.

Durante, al menos, 50 000 años, hubo poco contacto entre las culturas aborígenes y el resto del mundo. Así que, ¿de dónde sale ese origen común? Los investigadores Ray Norris (que aporta esas particularidades contadas en este artículo) y Barnaby Norris sugieren cuál podría ser la explicación. El estudio será publicado en un libro llamado Advancing Cultural Astronomy (aunque puede consultarse una versión preliminar, enlazada al final de este artículo). En él, exploran la conexión entre las Pléyades y las historias a su alrededor.

Un origen común… de todos

Todos los seres humanos modernos descienden de individuos que vivieron en África antes de que comenzasen sus migraciones a otros lugares del mundo, hace unos 100 000 años. ¿Es posible que las historias de las siete hermanas sean tan antiguas? ¿puede que aquellos seres humanos llevasen, consigo mismos, las historias a medida que viajaban a Australia, Europa y Asia? Las observaciones con la sonda Gaia, y otros telescopios, muestran que las Pléyades se mueven lentamente en el firmamento. Algo que resulta muy útil.

En la actualidad, una estrella, Pleione, está tan cerca de la estrella Atlas que parecen un único astro a simple vista. Pero si se retrocede en el tiempo, hace 100 000 años Pleione estaba más lejos de Atlas. Hubiese sido fácilmente observable a simple vista. En aquel entonces, por tanto, la gente habría visto siete estrellas. Ese movimiento, explican los investigadores, podría ayudar a resolver dos rompecabezas. Por un lado, la similitud entre las historias aborígenes y griegas. Por otro, el hecho de que comúnmente sea conocida como las siete hermanas.

Algo que choca con su aspecto actuar, en el que solo seis estrellas son visibles. Esto permite a los investigadores pintar un cuadro de lo más curioso.¿Es posible que las historias de las Siete Hermanas, y Orión, sean tan antiguas que nuestros lejanos ancestros las contasen en torno a hogueras, en África, hace 100 000 años? Plantean que podrían ser, de hecho, las historias más antiguas del mundo. Y si es así, quiere decir que, en ese aspecto también, comenzó con la observación del firmamento y un intento por explicar lo que observábamos…

Estudio

El estudio es R. Norris y B. Norris; «Why are there Seven Sisters?«. Será publicado a principios de 2021, pero la versión preliminar ya está disponible en este enlace.

Referencias: The Conversation