China tiene su propio avión espacial secreto, al igual que Estados Unidos. Ahora, se ha convertido en noticia porque ha aterrizado después de permanecer cientos de días en el espacio. Naturalmente, no se ha publicado demasiada información al respecto, pero resulta interesante…

El avión espacial secreto de China ha regresado a la Tierra

En los últimos años, el gigante asiático ha estado desarrollando un avión espacial autónomo, reutilizable, que competirá con el X-37B Orbital Test Vehicle (OTV) de Estados Unidos. El avión espacial de China recibe el apodo de Shenlong (dragón divino). Ha terminado su segundo vuelo de prueba tras pasar 276 días en la órbita de la Tierra. La agencia estatal de noticias de China, Xinhua, ha destacado el vuelo como un gran avance para el programa espacial chino. Los detalles, naturalmente, han sido más bien escasos, pero se ha contado alguna que otra cosa.

El avión espacial de China ha regresado al planeta
Astronautas chinos realizando un paseo espacial en la Estación Espacial Tiangong. Crédito: Liu Fang/Xinhua

El avión espacial experimental reutilizable de China, el Chongfu Shiyong Shiyan Hangtian Qi (CSSHQ) ha estado rodeado de misterio desde que se desvelase su existencia. En su anterior vuelo de prueba (CSSHQ-1), despegó el 4 de septiembre de 2020 y pasó dos días en la órbita de la Tierra. Durante su segundo vuelo, CSSHQ-2, el avión espacial despegó desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan, en el desierto de Gobi, el 4 de agosto de 2022. Despegó a bordo de un cohete Long March-2F/T (CZ-2) y aterrizó el pasado 8 de mayo.

Xinhua publicó un artículo poco después de que se produjese el aterrizaje. El fabricante del avión espacial, China Aerospace Science and Techonoly Corp. (CASC) compartió esa publicación en la red social china Weixin. En ella, se decía lo siguiente: «el avión espacial reutilizable de prueba lanzado con éxito por nuestro país desde el Centro de lanzamiento de satélites de Jiuquan, ha regresado con éxito, aterrizando en la fecha planificada, el 8 de mayo, tras pasar 276 días. El éxito de la prueba es un logro importante en la investigación de tecnología espacial reutilizable

Pocos detalles sobre la misión

Nos proporcionará, continúa el mensaje, un método conveniente y barato para el uso pacífico del espacio en el futuro». No se han publicado detalles sobre la misión, la nave espacial o qué operaciones se llevaron a cabo en la órbita de la Tierra. Andrew Jones, corresponsal de SpaceNews, sí ha recogido las actividades a lo largo del vuelo de prueba, y las resumía en su propio artículo. En él, cuenta que la nave llevó a cabo muchas maniobras orbitales, tanto pequeñas como grandes, a lo largo de su vuelo, con muchos ajustes en las últimas semanas para el aterrizaje.

Lo más probable, explica Jones, es que el aterrizaje se produjese en la base militar de Lop Nur, en Xinjiang, basándose en la información disponible sobre la órbita que describía la nave y que hubiera permitido ese aterrizaje. En agosto de 2022, el propio Jones recogía que la nave desplegó un pequeño satélite a los 90 días de iniciar su órbita. Aunque no está claro cuál es el propósito y naturaleza de ese satélite, los datos de monitorización de la Fuerza Espacial de EE. UU. muestran que era un satélite pequeño que permaneció muy cerca de la nave.

Aunque el vuelo ha sido un gran paso para la investigación de China, sobre la tecnología de naves reutilizables, está lejos de lo conseguido con el X-37B, el avión espacial no tripulado de Boeing que está utilizando Estados Unidos. Desde abril de 2010, ha llevado a cabo seis vuelos de prueba. En el último, OTV-6, estuvo más de novecientos días en el espacio y desplegó diferentes experimentos científicos en órbita. Al igual que con el avión espacial de China, los vuelos del X-37B se han tratado como información clasificada.

China busca desarrollar un programa completamente reutilizable

Por diferentes fuentes, se ha confirmado que los objetivos del X-37B incluían el desarrollo de vehículos de reconocimiento orbital (para uso militar) y el uso y desarrollo de tecnologías espaciales reutilizables, motores hipersónicos y sistemas de guiado autónomos. En realidad, China está desarrollándolo como parte de su programa reutilizable, en el que también plantea un gran cohete, similar a Starship, de SpaceX. El concepto se presentó ya en abril de 2021. La China Aerospace Science and Industry Corporation (CASIC) también quiere su propio avión espacial reutilizable.

El rover Yutu, de la misión Chang’e 3. Crédito: CASC/China Ministry of Defense

Ese avión es apodado Tengyun (jinete de nubes, aproximadamente). Según un vídeo publicado por CASIC en 2021, este vehículo sería parte de un sistema de lanzamiento, en dos fases, que utilizaría un vehículo de lanzamiento desde el aire, de una manera similar a como hace Virgin Galactic. Este último desarrollo muestra el progreso de China en los últimos años. En cuanto a exploración robótica de la Luna (el programa Chang’e) y Marte (Tianwen-1 y el róver Zhurong), vuelos tripulados y estaciones espaciales, China ha avanzado muchísimo.

A lo largo de lo que queda de década, los planes de China pasan por enviar sus primeros astronautas a la superficie de la Luna. También establecerán su Estación Internacional de Investigación Lunar, que competirá con el programa Artemisa, de la NASA. En 2033, esperan enviar sus primeras misiones tripuladas a Marte. De conseguir completar estos plazos, quiere decir que competirán directamente con NASA por ser los primeros en enviar seres humanos al planeta rojo, porque se planea para el mismo momento. ¿Quién llegará primero?

Referencias: Universe Today