Un grupo de investigadores cree que Venus pudo ser habitable durante mucho tiempo. Hasta hace, apenas, unos cientos de millones de años. No solo eso, si su historia hubiese sido diferente, incluso hoy mismo podría seguir siendo habitable…

Venus pudo ser habitable hasta hace muy poco

En la actualidad, Venus es un mundo completamente antagónico a la Tierra. Su temperatura es tan elevada que el plomo se funde en su superficie. Es extremadamente seco y tiene una presión 90 veces superior a la de nuestro planeta. Pero se sabe que no siempre fue así. Lo que no está tan claro es si en algún momento llegó a ofrecer condiciones habitables. En el pasado, ya se había planteado que quizá sí. No solo eso, puede que llegase a ser habitable, incluso, durante mucho más tiempo de lo que Marte lo fue. Pero, ¿cuánto exactamente?

Venus pudo ser habitable durante miles de millones de años
Representación artística de Venus terraformado. Crédito: Wikimedia Commons/Ittiz

Un grupo de investigadores cree que, en realidad, Venus comenzó su camino hacia el mundo infernal, que es hoy en día, hace muy poco tiempo en la escala cósmica. Apenas poco más de 700 millones de años. Hasta ese entonces, el planeta más parecido al nuestro (por tamaño y características) era, seguramente, un mundo muy similar al nuestro. Si están en lo cierto, quiere decir que pudo mantener unas condiciones habitables durante de 2 a 3000 millones de años. Para saber si estaban en lo cierto, crearon varios modelos sobre el entorno de Venus.

En concreto, cinco escenarios diferentes, con una cantidad de agua variable. En esas pruebas, además, se incluye un modelo, en 3D, de circulación general que permitiría tener en cuenta los cambios atmosféricos y el aumento de la radiación procedente del Sol a lo largo del tiempo. En tres de esos escenarios, supusieron que el aspecto de Venus sería muy similar al que tiene en la actualidad. La profundidad de sus océanos varíaría desde los 10 metros a los 310. Así como una pequeña cantidad de agua atrapada en el propio suelo…

Venus pudo tener las condiciones para ser habitable de muchas maneras

También probaron con una topografía más parecida a la de la Tierra, con un océano con una profundidad de hasta 310 metros. Finalmente, analizaron cómo hubiese sido un Venus completamente recubierto por un océano de 158 metros de profundidad. Curiosamente, las cinco simulaciones arrojan el mismo resultado: el planeta habría sido capaz de mantener una temperatura estable, desde unos 20 ºC hasta los 50 ºC durante 3000 millones de años. Pero algo transformó el 80% de su superficie y terminó con esa fase.

Venus, observado en luz ultravioleta en 1979. Crédito: NSSDC Photo Gallery

Si no fuese por esa secuencia, que provocó que la superficie de Venus cambiase dramáticamente, y que expulsó la mayoría del dióxido de carbono atrapado en la superficie, el planeta podría seguir siendo habitable incluso en nuestros días. Para los investigadores, ese evento fue el que provocó que Venus dejase de tener un clima estable, que había mantenido durante miles de millones de años, para terminar convirtiéndose en el lugar infernal que conocemos en la actualidad. Si no, podría haber sido un lugar muy similar a nuestro planeta.

Suponiendo que la evolución de Venus fue similar a la de la Tierra, el planeta debió enfriarse rápidamente poco después de su formación, hace unos 4500 millones de años. Su atmósfera original habría estado dominada por el dióxido de carbono. Un elemento que, poco a poco, habría sido atrapado por las rocas de silicato, formando carbonatos que habrían quedado atrapados en la corteza de Venus. Su atmósfera, hasta hace 715 millones de años, habría sido muy similar a la terrestre.

El mundo que pudo ser como la Tierra… pero no fue

Aquella atmósfera habría sido rica en nitrógeno, con pequeñas cantidades de metano y dióxido de carbono. Si no se hubiese producido un fenómeno, que provocó la liberación masiva de ese dióxido de carbono atrapado, se habría mantenido así hasta la actualidad. No está claro qué fue lo que lo provocó, pero transformó el 80% de la superficie. Una posibilidad que se ha planteado es que se liberase una gran cantidad de magma, que liberó mucho dióxido de carbono en la atmósfera. Ese magma se habría solidificado antes de volver al suelo.

Concepto artístico de la superficie de Venus. Crédito: ESA/AOES Medialab

Al suceder así, se habría creado una barrera que impediría que el dióxido de carbono fuese atrapado de nuevo por la superficie. Ese fenómeno explicaría por qué la atmósfera del planeta cambió hasta convertirse en lo que conocemos hoy. Su densidad aumentó 90 veces y, junto a todo ese dióxido de carbono, se produjo un efecto invernadero imparable, provocando que su temperatura se disparase hasta los 462 ºC. Esto, además, desafía a la imagen existente de Venus. Siempre se ha considerado que el planeta está en un lugar especial.

La franja en la que se encuentra, en el borde interior de la zona habitable del Sistema Solar, se denomina, precisamente, la zona de Venus. Indica un lugar en el que, en teoría, un planeta absorbe demasiada radiación como para poder albergar agua líquida en su superficie. Las simulaciones de los investigadores indican todo lo contrario. En la actualidad, Venus recibe el doble de radiación solar que la Tierra, pero, según explican, sus modelos muestran que, incluso en la actualidad, el planeta seguiría siendo capaz de tener agua líquida.

No se puede afirmar que Venus fuese habitable en el pasado

Algo que encaja con lo publicado, por estos mismos científicos, en 2016. En aquel momento analizaron cómo habría afectado, a la habitabilidad de Venus, la presencia de un océano en su antigüedad. Aquello les llevó a concluir que, con un período de rotación más rápido, de 16 días terrestres, su clima habría sido habitable hasta hace unos 715 millones de años. Pero esto, sin embargo, deja algunas preguntas por responder. No se puede afirmar que Venus fuese habitable hasta hace solo unos pocos cientos de millones de años.

Venus pudo ser habitable hasta hace solo 700 millones de años...
Recreación artística de la superficie de Venus. Crédito: ESA

Por un lado, hará falta determinar a qué velocidad se enfrió Venus. Según cómo sucediese, es posible que, en realidad, nunca llegase a tener la oportunidad de tener agua líquida en su superficie. Por otro lado, está ese evento que transformó la mayor parte de su superficie. ¿Cómo sucedió? ¿Fue un único evento? cataclísmico, podríamos decir, o, por el contrario, ¿sucedió como consecuencia de una serie de fenómenos que se produjeron a lo largo de miles de millones de años? Puede que Venus hubiese estado condenado desde el principio.

Sea como fuere, el panorama que pinta el estudio de estos investigadores es, como mínimo, intrigante. Si le sumamos que Marte pudo ser habitable, también, durante sus primeros miles de millones de años. El Sistema Solar tuvo, durante una buena parte de su existencia, tres planetas que, sin duda, podrían haber sido tres canicas azules. Quizá, incluso, tres planetas habitados. En términos astronómicos, podríamos decir que, hasta hace muy poco, hubiesen sido dos mundos (Marte dejó de ser habitable mucho antes). Es una imagen intrigante…

Estudio

El estudio es M. Way y A. Del Genio; «A view tothe possible habitability of ancient Venus over three billion years». Presentado en el Congreso Europeo de Ciencias Planetarias en Ginebra, Suiza, el 20 de septiembre de 2019. Puede ser consultado en este enlace.

Referencias: Universe Today