Aunque podría parecer que lo sabemos todo sobre el sistema estelar más cercano al Sol, lo cierto es que durante décadas ha existido un debate sobre si Proxima Centauri orbita alrededor de Alfa Centauri o, por el contrario, no se trata más que de una estrella de paso. Ahora parece que por fin lo tenemos claro…

Un sistema triple

Imagen de Alfa Centauri A y B (que aparecen como una única estrella en esta imagen) y Próxima Centauri, que está en la parte derecha y es mucho más tenue. Crédito: Digitized Sky Survey 2/ Davide De Martin/Mahdi Zamani/ESO

Imagen de Alfa Centauri A y B (que aparecen como una única estrella en esta imagen) y Próxima Centauri, que está en la parte derecha y es mucho más tenue.
Crédito: Digitized Sky Survey 2/ Davide De Martin/Mahdi Zamani/ESO

Sabíamos que, en el peor de los casos, nuestro vecino estelar más cercano estaría compuesto por un sistema doble (el formado por las estrellas Alfa Centauri A y B) y una estrella pasajera, pero ahora tenemos la confirmación de que Proxima Centauri, que está a 4,24 años-luz de distancia de la Tierra gira alrededor de sus compañeras. Como seguramente sepas, hemos hablado mucho de ellos recientemente, por el descubrimiento de Proxima b, el exoplaneta más cercano al Sistema Solar y que podría tener agua líquida en su superficie.

Un poco más lejos, a 4,37 años-luz, tenemos a las dos estrellas principales. Alfa Centauri A y B orbitan mutuamente en un período de 80 años. Son muy fáciles de observar desde el hemisferio sur, porque su brillo las convierte en la tercera estrella más brillante del firmamento nocturno. En contraste, Proxima Centauri es tan tenue que sólo puede ser observada con un telescopio, quizá por eso no sea sorprendente saber que se descubrió en 1915.

Siempre habíamos sospechado que las tres estrellas formaban parte de un mismo sistema, pero hasta ahora no había sido posible demostrarlo. La teoría es bastante sencilla. Si Proxima Centauri está ligada a Alfa Centauri A y B, entonces debería moverse a través del espacio con una velocidad muy parecida, o de otra manera, esa diminuta enana roja terminaría escapando de su influencia gravitacional. La estrella está a 13.000 veces la distancia que separa el Sol de la Tierra.

Midiendo su velocidad

Concepto artístico del planeta, Próxima b, orbitando alrededor de su estrella, con Alfa Centauri A y B al fondo. Crédito: ESO/M. Kornmesser

Concepto artístico del planeta, Próxima b, orbitando alrededor de su estrella, con Alfa Centauri A y B al fondo.
Crédito: ESO/M. Kornmesser

En los últimos años, los cazadores de exoplanetas han sido capaces de medir velocidades con extrema precisión, en su búsqueda del pequeño impacto que la presencia de un planeta como Proxima b tiene en una estrella como la suya, alejándola y acercándola de nosotros. Es un método muy conocido en la detección de mundos mucho más allá del Sistema Solar, y nos ha permitido concluir que Proxima Centauri está ligada gravitacionalmente a sus compañeras.

Además, se ha logrado calcular por primera vez la órbita de la estrella. Tarda 550.000 años en completar una vuelta, en una órbita elíptica que, en su momento de mayor cercanía, la lleva a una distancia de sus compañeras de 4.300 unidades astronómicas (1 unidad astronómica es la distancia que separa la Tierra del Sol), y que en su momento de mayor lejanía, en el punto en el que se encuentra en estos momentos, le lleva a 13.000 UA.

Para poder determinar esas velocidades con precisión, los investigadores han tenido que preocuparse de efectos que normalmente son ignorados Por ejemplo, los fotones que escapan de la gravedad de una estrella pierden energía, cambiando su longitud de onda ligeramente hacia el rojo, mientras que la superficie de la estrella puede provocar que esos mismos fotones cambien su longitud ligeramente hacia el azul.

Tras corregir esos efectos, los científicos que han trabajado en el estudio han llegado a la conclusión de que la velocidad de Proxima Centauri difiere de la de sus compañeras en sólo 270 metros por segundo, aproximadamente la mitad de la velocidad a la que necesitaría moverse para poder escapar de la influencia gravitacional de Alfa Centauri, y por tanto confirmando que se trata de un sistema triple.

El estudio es P. Kervella, F. Thévenin, C. Lovis, «Proxima’s orbit around Alpha Centauri» y puede ser consultado en arXiv.

Referencias: New Scientist, arXiv