El pasado viernes, 3 de agosto, la NASA presentó las primeras tripulaciones de SpaceX y Boeing. Se trata de los astronautas que participarán en los vuelos de pruebas, de ambas compañías, con destino a la Estación Espacial Internacional. Es un paso muy importante…

Las primeras tripulaciones de SpaceX y Boeing

La NASA presenta las primeras tripulaciones de SpaceX y Boeing

Foto de los nueve astronautas que viajarán como primeras tripulaciones de SpaceX y Boeing.
Crédito: NASA

El próximo año, en 2019, veremos los primeros vuelos tripulados de dos empresas privadas. Esto es un gran paso para la industria aeroespacial. El anuncio de las primeras tripulaciones de SpaceX y Boeing es interesante por lo que supone. Marca un cambio en el sector. Aunque, quizá comprensiblemente, la noticia está teniendo mucho recorrido por un asunto mucho más patriótico. Supone la recuperación de los lanzamientos tripulados desde suelo estadounidense.

Porque, no hay que olvidar que desde 2011 no se ha realizado ningún lanzamiento (con tripulación) desde Estados Unidos. Tras el último vuelo del transbordador espacial, en 2011, la NASA ha tenido que recurrir al extranjero. Todas sus tripulaciones han tenido que partir a la Estación Espacial Internacional haciendo uso de la nave Soyuz, de Roscosmos, la agencia espacial rusa. Por lo que, para ellos, es un momento importante en más de un sentido.

Así que, bajo este contexto, el pasado 3 de agosto se produjo este anuncio doblemente importante. Hemos conocido a las nueve personas que formarán las primeras tripulaciones de SpaceX y Boeing. Eric Boe, que pilotó los transbordadores espaciales Endeavour y Discovery; Christopher Ferguson, que fue comandante de los transbordadores Endeavour y Atlantis, y después pasó a trabajar con Boeing y Sunita Williams, que participó en dos expediciones de la Estación Espacial Internacional.

Novatos en el espacio

Concepto artístico del módulo CST-100 Starliner de Boeing.
Crédito: Boeing

El resto del equipo está formado por Nicole Aunapu Mann, una piloto de pruebas de la marina; John Cassada, otro piloto de pruebas; Robert Behnken, que participó en dos misiones del transbordador Endeavour; Douglas Hurley, que participó en Endeavour y Atlantis. Así como Michael Hopkins, astronauta desde 2009, y Victor Glover, Comandante del ejército naval de EEUU y astronauta desde 2013.

De momento, en cualquier caso, habrá que esperar unos meses más para verles en acción. El plan, según parece, es que primero se realice un vuelo sin tripulación, por parte de SpaceX, en este mismo 2018. En algún momento, mandarán la cápsula Dragón (modificada para tripulación) pero solo con cargamento, hacia la estación. Después, ya en abril de 2019, dos de los astronautas (Michael Hopkins y Victor Glover) partirán en su viaje.

De los dos, hay que decir que Hopkins no es un novato en la Estación Espacial Internacional. Ya ha pasado 166 días en sus instalaciones. Respecto a Boeing, también hay que esperar todavía un poco para ver su Starliner en acción. Se esperaba que el primer vuelo de prueba tuviese lugar en este mismo mes de agosto, pero se ha retrasado. Parece que la nueva fecha que se tiene en mente es hacia finales o principios del año que viene.

Recuperando los lanzamientos desde suelo estadounidense

La cápsula Dragon, vista desde la Estación Espacial Internacional el 25 de mayo de 2012.
Crédito: SpaceX

Además, el Starliner de Boeing también tiene otra prueba pendiente. Cuenta con un sistema para interrumpir el lanzamiento en caso de problema en tierra. La idea es que, si algo sale mal, la cápsula se desconecte de los cohetes y se aleje antes de que pueda haber algún peligro para los tripulantes. Esa prueba ya no se celebrará, como mínimo, hasta primavera de 2019. Por lo que, seguramente, será SpaceX la primera empresa privada en enviar seres humanos al espacio.

Para los estadounidenses, el principal hito de todo esto no es tanto la irrupción de las empresas privadas. Sino el hecho de que, después de 7 años, regresan los lanzamientos tripulados desde Cabo Cañaveral. Algo que les facilitará las cosas, al no tener que viajar hasta Rusia para sus lanzamientos. Pero, en la práctica, queda en segundo plano frente a lo que supone la irrupción de las empresas privadas en los lanzamientos tripulados.

SpaceX y Boeing serán las primeras compañías en enviar seres humanos al espacio. No serán las únicas, probablemente. En los próximos años, el sector espacial privado, que no ha dejado de crecer, seguirá haciéndolo. Cada vez estamos más cerca de ver esos objetivos que todavía parecen meras fábulas. Cosas como la llegada de los primeros hoteles espaciales, que quizá podrían ser una realidad antes de lo que esperamos…

Referencias: IFLScience, The Verge