El planeta rojo es uno de los grandes focos de atención de la astronomía moderna. Ahora, un grupo de investigadores ha concluido que la vida en Marte pudo aparecer antes de lo pensado. Quizá, incluso antes de que lo hiciese en la Tierra…

La vida en Marte pudo aparecer tras el Bombardeo Intenso Tardío

Poco después de la formación del Sistema Solar, los planetas interiores pasaron por un capítulo muy convulso, al que conocemos como Bombardeo Intenso Tardío. Fue, en aquella época, cuando se produjeron la mayoría de cráteres que podemos observar en la superficie de la Luna. Un grupo de investigadores plantea que la vida en Marte pudo aparecer justo después de que terminase el bombardeo en el planeta rojo. O, mejor dicho, pudo tener la posibilidad de desarrollarse. Porque, no hay que olvidarlo, todavía no sabemos si llegó a tener vida en algún momento.

La vida en Marte pudo aparecer antes de lo pensado
Impresión artística de cómo pudo ser la superficie de Marte hace 4000 millones de años. Crédito: ESO/M. Kornmesser

Así, sugieren que Marte pudo tener las condiciones apropiadas hace 4480 millones de años. La cifra no solo nos permite entender mejor las particularidades del planeta rojo. También podría afectar a la comprensión que tenemos de la evolución de nuestro propio planeta. Porque, del mismo modo, explican que las mejores condiciones, en Marte, debieron tener lugar hacer entre 3500 y 4200 millones de años. Es un lapso que supera, en 500 millones de años, a la evidencia más antigua de la aparición de vida en nuestro propio planeta.

Puede que aquellos impactos no solo moldeasen la superficie de los planetas rocosos. También pudieron tener un efecto beneficioso. En el caso de Marte, pudo contribuir a que el agua, atrapada en el interior del planeta, se liberase más rápido. Dando lugar a la aparición de las condiciones necesarias para que la vida pudiese desarrollarse. Esta información, además, podría permitir determinar mejor las regiones, que mejor resultado nos pueden dar, a la hora de llevar a cabo una misión para devolver muestras del planeta rojo.

El desarrollo del Bombardeo Intenso Tardío

No hay dudas de que el Bombardeo Intenso Tardío sucedió. Las cicatrices, en forma de cráteres, en la Luna son una buena cuenta de ello. Tampoco hay duda de que, con el paso del tiempo, la cantidad de impactos que sufrían los objetos celestes en el interior del Sistema Solar fue disminuyendo. Llegó un momento en el que eran tan raros que la vida, finalmente, pudo tener las condiciones apropiadas para desarrollarse. Lo que no está tan claro, sin embargo, es exactamente cuándo terminó aquella fase tan convulsa.

Representación artística de la Tierra durante el Bombardeo Intenso Tardío, que tuvo lugar hace unos 4.100 millones de años. Crédito: Julian Baum/Take 27 Ltd

Se ha sugerido que finalizó hace 3800 millones de años. Pero hay motivos para creer que no tuvo por qué ser así. En este caso, los investigadores han analizado los granos de mineral más antiguos conocidos, procedentes de meteoritos, que se cree que tuvieron su origen en las tierras altas del sur del planeta rojo. Estos granos, vistos a nivel atómico, apenas han cambiado desde que se cristalizasen en la superficie de Marte. Algo que contrasta con los granos, de zonas que recibieron impactos, en la Tierra y en la Luna. Estos sí habían cambiado.

Más del 80 % de esos granos contenían características asociadas con impactos. Presentaban signos de haber estado expuestos a una presión y temperatura muy elevadas. Los resultados indican que el bombardeo debió terminar en Marte antes de que se formasen los minerales analizados. Por lo que, ya en aquel momento, la vida en Marte pudo aparecer. La superficie debía ser habitable, en cuanto a frecuencia de impactos se refiere, en el mismo período en el que el agua debió ser más abundante en la superficie del planeta rojo.

Si la vida en Marte pudo aparecer antes… ¿qué implica para la Tierra?

En aquella época la Tierra ya tenía agua. Es posible, plantean los investigadores, que nuestra percepción general sea errónea. Es decir, puede que la vida, en el Sistema Solar, apareciese antes de lo que se pensaba. Aunque en este estudio no se hace mención al respecto, sería interesante saber si sucedió lo mismo con Venus. No hay que olvidar que el segundo planeta más cercano al Sol también fue, en el pasado, mucho más similar a nuestro planeta. También tuvo condiciones habitables.

Concepto artístico del Eón Arcaico de la Tierra, hace entre 4000 y 2500 millones de años. Crédito: ocean.si.edu

Incluso, se ha llegado a plantear que quizá mantuviese un entorno habitable durante más tiempo del que Marte fue capaz de hacerlo. Pero las duras condiciones que soporta en la actualidad hacen que su estudio sea mucho más complicado. Sea como fuere, este estudio supone dar otro empujón, todavía más hacia el pasado, al momento en el que pudo aparecer la vida. Nos vuelve a pintar un escenario que ya se sospechaba. La vida en Marte, y en otros lugares, pudo aparecer tan pronto como fue posible. En el caso de la Tierra fue prácticamente así.

En nuestro planeta, la vida surgió casi tan rápidamente como fue posible. Tan pronto como se dieron las condiciones apropiadas. Si suponemos que no hay nada especial sobre nuestro planeta, no hay nada que nos impida pensar que quizá sucediese lo mismo en Venus y Marte. Sin embargo, qué fue de aquellas formas de vida, si es que alguna vez llegaron a existir, o cómo evolucionaron, es todo un misterio. Pero, al menos con el planeta rojo, cada vez estamos más cerca de desentrañar su relación con la vida. Quizá no siempre fue un páramo yermo…

Estudio

El estudio es D. Moser, G. Arcuri, D. Reinhard et al.; «Decline of giant impacts on Mars by 4.48 billion years ago and an early opportunity for habitability». Publicado en la revista Nature Geoscience el 24 de junio de 2019.

Referencias: Phys