La Tierra vista por los extraterrestres sería un exoplaneta, igual que lo son para nosotros los mundos alrededor de otras estrellas. Teniendo en cuenta este planteamiento, con una tecnología similar a la nuestra a su disposición ¿serían capaces de determinar si es habitable?

La Tierra vista por los extraterrestres

A lo largo de los últimos años, nuestra capacidad para detectar planetas más allá del Sistema Solar ha mejorado notablemente. En la actualidad conocemos más de 4000 exoplanetas y, poco a poco, se ha ido trasladando el foco de la investigación actual. Ya no es solo descubrir exoplanetas, ahora el siguiente gran paso es caracterizarlos. Es decir, comprender cómo son e intentar determinar sus características. Los instrumentos de próxima generación deberían permitir conocer mucho mejor la superficie y atmósferas de esos exoplanetas.

La Tierra vista por los extraterrestres... ¿sería habitable?
Imagen de la Tierra tomada desde la Estación Espacial Internacional. Crédito: Expedición 7 de la EEI, EOL, NASA

Sin embargo, ¿qué es lo que habría que buscar exactamente? Porque no estamos muy seguros de qué es lo que hay que buscar en un exoplaneta habitable. Aquí es donde entra en escena un estudio que ha decidido darle la vuelta a la pregunta. Conocemos un planeta habitable, la Tierra. Así que, en lugar de intentar reconocer otros planetas como habitables, un grupo de investigadores ha optado por la vía opuesta. ¿Cómo sería la Tierra vista por extraterrestres con una tecnología similar a la nuestra? ¿Qué es lo que podrían ver desde años-luz?

Para dar con la respuesta, los investigadores han construido un mapa, del aspecto que tendría nuestro planeta, para observadores en algún lugar remoto de la galaxia. El objetivo no es simplemente un pasatiempo o satisfacer la curiosidad. Podría ayudar a los astrónomos a identificar diferentes características, en la superficie, de exoplanetas rocosos que se estudien en el futuro. A fin de cuentas, el mejor ejemplo de planeta habitable lo tenemos aquí mismo. ¿Por qué no aprovecharlo y ver qué información nos aporta?

La observación indirecta para el estudio de exoplanetas

Con nuestras herramientas, es imposible observar exoplanetas de forma directa, salvo en algunos casos muy específicos. Esto dificulta comprender cómo es su atmósfera (si es que la tienen) y cómo podría ser su superficie. Lo único que se puede aspirar a conseguir, en esos casos, es saber cuánto parecido tiene con la Tierra. En este estudio, se ha examinado nuestro planeta con esas mismas limitaciones. No es una respuesta perfecta, porque no se sabe si todo lo que hay aquí es imprescindible, o la vida puede necesitar menos requisitos.

Concepto artístico de exoplanetas similares a la Tierra. Crédito: NASA

Pero es un buen punto de partida, porque esta fórmula, sea completa o excesiva, funciona. Permite entender qué aspecto tiene la Tierra vista por extraterrestres y, en consecuencia, comprender cómo pueden ser otros planetas estudiados desde aquí. Puede ser la herramienta necesaria para indicar el camino a seguir a la hora de descartar posibles planetas habitables de los que no lo son, a pesar de que podrían cumplir con los requisitos más básicos. Cosas como estar en la zona habitable de su estrella o tener un tamaño similar al de nuestro planeta.

En la Tierra, uno de los aspectos más importantes es el ciclo del agua. Es un punto clave de toda la vida en la superficie. Tiene tres fases muy bien diferenciadas. La presencia de vapor de agua en la atmósfera, nubes de agua condensada y partículas de hielo, y la presencia de masas de agua sobre la superficie. Identificarlas en otros mundos, por tanto, podría ser una señal fiable de que ese exoplaneta podría ser habitable. Quizá incluso de que pudiese tener vida. Así que un primer paso parece que será la capacidad de identificar estos rasgos.

Las características que se pueden definir de la Tierra si fuese vista por extraterrestres

Para definir el aspecto que tendría nuestro planeta, a los ojos de esos posibles extraterrestres, los investigadores recurrieron a 9740 imágenes del telescopio DSCOVR. Las imágenes, tomadas cada entre 68 y 110 minutos, comprenden un período de dos años (2016 y 2017) y capturaron la luz, reflejada por la atmósfera de la Tierra, en diferentes longitudes de onda del espectro electromagnético. Después, las combinaron para formar un espectro, a lo largo del tiempo, de esa luz reflejada. Lo integraron con el disco de la Tierra.

La Tierra, vista el 6 de julio de 2015, desde una distancia de 1,5 millones de kilómetros. Crédito: NASA

De esta manera, se obtiene una imagen de la Tierra similar a lo que podría ver un observador que estuviese a años-luz de nuestro planeta, a lo largo de dos años. Sorprendentemente, hay más información de la que se podría pensar. Según explican los investigadores, uno de los componentes principales de la curva de luz del planeta está muy relacionada con la fracción de tierra iluminada directamente. Al comparar las imágenes originales con su reconstrucción, descubrieron qué partes indicaban presencia de tierra y presencia de nubes.

Después, seleccionaron los parámetros que más se acercaban a los terrestres, y los ajustaron al período de 24 horas de rotación de nuestro planeta. De forma que pudieron definir un mapa que muestra el aspecto de la curva de luz de nuestro planeta visto a gran distancia. Es decir, en función de qué parte de la Tierra esté iluminada, y las nubes que haya en su atmósfera, la luz reflejada por nuestro planeta va variando con el paso del tiempo. Eso es lo que lograron reconstruir para entender cómo es la Tierra vista por extraterrestres.

Se podría determinar la presencia de muchas cosas…

En la imagen que acompaña esta sección, las líneas negras representan el parámetro asociado con la presencia de Tierra. Se corresponden, aproximadamente, con el contorno de las costas de los continentes, que están coloreados den verde para hacerlos más distinguibles. África en el centro, Asia en la parte superior derecha, América del Norte y Sur en la izquierda y la Antártida abajo. El resto se corresponde con los océanos, con las secciones más profundas marcadas en azul y las de menor profundidad destacadas en rojo.

La Tierra vista por los extraterrestres, representada por su curva de luz, tendría un aspecto similar a éste.
Curva de luz de la Tierra, tal y como podría ser vista por los extraterrestres. Crédito: S. Fan et. al., arXiv

Estas representaciones, para los exoplanetas, podrían permitir identificar la presencia de océanos, nubes y hasta cascos polares. Todos los elementos que esperaríamos encontrar en un planeta que fuese habitable, por ser similar al nuestro. Si los investigadores están en lo correcto, se podría determinar la distribución aproximada de masa terrestre, y cómo es su clima. Ambos son factores importantes para la vida en la Tierra, y se pueden distinguir en la curva de luz a años-luz de distancia. Es decir, buenas noticias para la búsqueda de vida.

Pero, para llegar a ese punto, hará falta que los telescopios de próxima generación entren en funcionamiento. Tanto el telescopio James Webb, o el Telescopio Extremadamente Grande, entre muchos otros, tendrán la capacidad de analizar exoplanetas rocosos cercanos a sus estrellas. con la ayuda de estudios como este, se podrá determinar si reúnen los requisitos necesarios para albergar vida. Puede que la búsqueda de un mundo que tenga todas las características de nuestro planeta, en otro lugar de la galaxia, no tarde mucho tiempo…

Estudio

El estudio es S. Fan, L. Cheng, L. Jia-Zheng et al; «Earth as an Exoplanet: A Two-dimensional Alien Map». Publicado en la revista The Astrophysical Journal Letters. Puede ser consultado en arXiv.

Referencias: Universe Today