La familia de satélites del Sistema Solar ha crecido con un nuevo descubrimiento. Un pequeño satélite de Neptuno llamado Hippocamp. Probablemente se trate del fragmento de un satélite, del gigante helado, que era mucho más grande…

Hippocamp, un satélite muy pequeño

Un grupo de investigadores ha anunciado el descubrimiento de Hippocamp, un satélite de 34 kilómetros de diámetro, en la órbita de Neptuno. Es su 14º satélite. En realidad, su descubrimiento no es reciente. Ya se observó en 2013 en varias imágenes tomadas por el telescopio Hubble. Los investigadores creen que podría ser el resultado de los restos de un cometa que chocó con Proteo, una de las lunas interiores más grandes de Neptuno. Los dos satélites están a 12 000 kilómetros de distancia y, en aquel momento, podrían haber estado incluso más cerca.

Hippocamp, un satélite muy pequeño
Imagen en la que se ha descubierto a Hippocamp. Crédito: Mark R. Showalter, SETI Institute

Es posible que los satélites interiores, los más cercanos a Neptuno, sufriesen múltiples colisiones a lo largo de su historia. El descubrimiento de Hippocamp, tan cercano al satélite Proteo, es una pista que apunta en esa dirección. El pasado de Neptuno debió ser muy caótico. Aun así, no se puede descartar que sea una coincidencia. Es decir, que Hippocamp y Proteo no estén relacionados entre sí, pero creen que el escenario de la colisión y posterior desprendimiento de Proteo es el que mejor explica tanto su tamaño como su cercanía. Proteo fue descubierto por la sonda Voyager 2 en 1989. Es el segundo satélite más grande de Neptuno.

El más grande es Tritón. Proteo solo tiene 400 kilómetros (poco en comparación a los satélites más grandes del Sistema Solar). Voyager 2, ya en aquel momento, envió imágenes de un gigantesco cráter de impacto en Proteo. Ahora, con el telescopio Hubble y el hallazgo de Hippocamp, se ha podido deducir que ese material fue expulsado y se convirtió en otro satélite. El hallazgo permite entender mejor la historia de Neptuno y del Sistema Solar. Hay que recordar que el Sistema Solar pasó por una fase muy turbulenta: el Bombardeo Intenso Tardío.

Podría haber más satélites alrededor de Neptuno

Además de Hippocamp, no es descartable, según los investigadores, que pueda haber más satélites en torno a Neptuno. Se han intentado encontrar más con las fotografías del telescopio Hubble pero, por ahora, no ha habido resultados. Para poder descubrirlas, probablemente habrá que poner una nave en la órbita del planeta. Tiene sentido si recordamos que esos satélites podrían ser muy pequeños. Es decir, desde la Tierra es francamente difícil observarlos y detectarlos con nuestras herramientas. ¿Cuántos satélites podríamos descubrir en una misión así?

Neptuno y Tritón, vistos por la sonda Voyager 2. Crédito: NASA

Es difícil saberlo, pero nos permite recordar que, incluso en torno a los planetas gigantes, podría haber muchos pequeños satélites que todavía no han sido descubiertos. La única forma, como dicen los investigadores, será con una misión que, desde su órbita, pueda analizar su entorno y encontrarlas. No solo estamos realizando descubrimientos en regiones más remotas como el Cinturón de Kuiper. El Sistema Solar es un lugar que, a pesar de lo que pueda parecer, todavía no conocemos completamente. Tardaremos en conocerlo al 100%.

Porque, a todo esto, también hay que sumarle el descubrimiento de objetos más lejanos. La Nube de Oort es la región más alejada del Sol. El hogar de, quizá, incluso billones de objetos de un kilómetro de diámetro. Para poder explorarla de forma directa, sin embargo, será necesario contar con naves que puedan viajar mucho más rápido. Las sondas Voyager todavía tardarán miles de años en alcanzarlas. Para cuando lleguen, lógicamente, serán objetos que no estarán en funcionamiento. ¿Cuántos satélites, planetas enanos, cometas, asteroides… nos quedan por descubrir? Muchos.

Estudio

El estudio es M. Showalter, I. de Pater et al.; «The seventh inner moon of Neptune». Publicado en la revista Nature el 20 de febrero de 2019. Puede ser consultado en este enlace.

Referencias: Phys