Hoy me gustaría hacer un pequeño alto en las noticias de astronomía que, cada semana, publico aquí en Astrobitácora, para compartir con vosotros una noticia que, como diría cierto Borbón, me llena de orgullo y satisfacción. Una noticia mucho más personal y que está relacionada con el mundo de la literatura…

Un viaje de diez años

Esta es la representación de Antaria, el planeta de origen de la mayor parte de los protagonistas de la novela. Crédito: Alejandro Riveiro

Esta es la representación de Antaria, el planeta de origen de la mayor parte de los protagonistas de la novela.
Crédito: Alejandro Riveiro

Allá por mediados de 2006 comencé a escribir una historia de ciencia ficción (técnicamente, en realidad, una space opera, es decir, una aventura espacial como puede ser Star Wars o el Juego de Ender). Inicialmente, ni siquiera estaba muy seguro de qué era exactamente lo que quería contar. Siempre me planteo así los relatos que escribo. Comienzo con una idea, y dejo que el mundo y los personajes que he creado me lleven hasta el final que a mí me gustaría contar.

A veces, esos personajes y ese mundo me obligan a hacer cambios que no tenía planeados. La idea inicial de Ecos de un futuro distante: Rebelión, era muy sencilla. Quería contar la historia de un emperador que no quería ser emperador. Una especie de anti-protagonista. La persona que desearía estar en cualquier otro lugar, menos en ése y que, irónicamente, era un lugar que muchos sí querrían ocupar por él.

Con el paso de los meses, las páginas se fueron acumulando, y con ellas fueron apareciendo otros protagonistas y otros lugares. El científico brillante, firme creyente de que la ciencia ha conseguido explicar y conocer todo lo que sucede en el universo, que de repente se encuentra cosas que no puede explicar. El minero que solo lo es por tradición familiar, pero un día decide tomar el mando de su vida y hacer lo que siempre ha soñado. Un mariscal que inspira poca confianza…

El nacimiento de un universo

El cúmulo abierto NGC 3572 y la región que lo rodea. Crédito: ESO/G. Beccari

En este mundo de ficción, decidí que la respuesta a la pregunta del millón es que no, no estamos solos en el Universo…
Crédito: ESO/G. Beccari

Cuando me quise dar cuenta, tenía entre mis manos una treintena de personajes, una veintena de planetas, varias facciones, y varias razas y especies. La idea original nunca desapareció, pero se fue adornando y convirtiéndose parte de un algo mucho más grande que ese emperador que no quería ser emperador. Se fue convirtiendo en un universo con vida propia, en el que podía sumergirme como si fuese un habitante más y ser cronista de aquello que le pasaba a sus habitantes.

Y así nació el mundo de Ecos de un futuro distante. Un universo ambientado en un futuro muy lejano (cien mil años), en el que la Humanidad se ha convertido en una especie más de las muchas que pueblan el Universo. Una aventura de corte épico en la que esos personajes se ven envueltos en una historia que va mucho más allá de ese pequeño imperio perdido en un sistema estelar que no parece importar a nadie.

A finales de 2011, estas ideas, aventuras y desventuras de personajes, y un universo que cada día era más y más grande, y más rico en historias y personajes, se convirtió en una novela escrita y completa. Ya no era una única novela, era la primera entrega de una trilogía destinada a contar el destino de un imperio, y una conspiración que podría poner en peligro la propia vida en el universo.

Una base en el lado oculto de la Luna sería perfecto para un telescopio que observase los lugares más recónditos del espacio. Crédito: Science Photo Library

Es una aventura con mucha más fantasía que ciencia. De hecho, hay algunas cosas que serían físicamente imposibles, y fueron decisiones deliberadas. Lo importante es la aventura, que sea entretenida.
Crédito: Science Photo Library

Así cobró vida Ecos de un futuro distante: Rebelión, la primera novela de la trilogía. Es el resultado de cinco años de imaginación, de inspiración y de frustración. Es el resultado de cinco años viendo cómo vive y respira ese mundo, conociendo a sus personajes, entendiendo cuáles debían ser sus orígenes y sus motivaciones, y su papel en ese mundo en el que les ha tocado existir. Hans es ese emperador que no quiere ser emperador. Khanam es ese científico que se encuentra cosas inexplicables, más propias de la magia que de la ciencia…

En aquel momento, intenté contactar con varias editoriales para ver si alguna de ellas podía considerarla lo suficientemente atractiva como para su publicación. Algunas de ellas se interesaron, pero las condiciones que me ofrecían no me resultaban especialmente atractivas (por diferentes consideraciones que, a día de hoy, no vienen al caso), y parecía que la novela estaba destinada a caer en el baúl de tantos y tantos proyectos que no llegan a buen puerto (y que son una parte necesaria de los triunfos y fracasos de cada uno de nosotros), hasta ahora…

La publicación de una aventura

El logo de Ediciones Atlantis, la editorial que publicará Ecos de un futuro distante: Rebelión Crédito: Ediciones Atlantis

El logo de Ediciones Atlantis, la editorial que publicará Ecos de un futuro distante: Rebelión
Crédito: Ediciones Atlantis

Diez años después, en 2016, Ediciones Atlantis ha decidido apostar por mi novela y publicarla en papel. Os podéis imaginar cómo me siento, y la sorpresa que supuso para mí ver su interés cuando yo ya había aceptado que, seguramente, nunca conseguiría darle mucha visibilidad. Es normal, vivimos en un mundo hiperconectado, en el que es muy difícil abrirse hueco. Todavía no está a la venta, de hecho ni siquiera está maquetada…

La novela será presentada en sociedad, formalmente, el próximo mes de abril. Todavía no tengo la fecha exacta porque depende, en gran medida, de la cantidad de gente que crea que va a asistir a la presentación (será en uno de los fines de semana de abril, eso seguro), y eso determinará que elijamos una sala u otra. Me gustaría, humildemente, invitaros a la presentación a aquellos que podáis estar interesados/as en venir.

El lunes volveré a publicar noticias de astronomía, y seguiremos hablando de lo que hemos cubierto en este primer año de vida en el blog, pero hoy, si me lo permitís, espero que no os moleste que comparta este pequeño logro personal con todos vosotros. Gracias por estar ahí.