Rea es el segundo satélite más grande de Saturno (sólo le supera Titán), aunque sólo tiene la mitad del tamaño de la Luna. Seguramente tu primera impresión al leer el nombre de este satélite es que sólo es una luna más de Saturno… Excepto porque es especial, a su manera.

Su descubrimiento

Giovanni Cassini.

Giovanni Cassini.

Rea es una de las cuatro lunas descubiertas por el italiano Giovanni Casinni, en 1672. Fue la segunda luna que observó, y la tercera que se descubrió alrededor del planeta. Tiene 1.530 kilómetros de diámetro, así que, aunque es la segunda luna más grande de Saturno, se queda muy lejos de Titán, que triplica su diámetro.

Pero el satélite no recibió su nombre actual hasta algún tiempo después. Inicialmente, Cassini simplemente denómino a las cuatro lunas que descubrió Sidera Lodoicea (las estrellas de Luis, refiriéndose al rey Luis IV). Esta luna fue conocida, simplemente, como Saturn V, basándose en la distancia a la que orbita el planeta. En 1847, John Herschel (hijo de William Herschel, del que he hablado en alguna ocasión en los artículos sobre el catálogo Messier), sugirió que los satélites de Saturno podían recibir las denominaciones de los titanes, los hermanos y hermanas del dios griego Cronos (cuyo equivalente romano era, como no podía ser de otra forma, Saturno).

En la mitología, Rea, hija de Urano y Gea, era la esposa de Cronos. Considerada la madre de los dioses, dio luz a varios de los dioses del Olimpo, incluyendo a Zeus y Hera (así como Hestia, Hades, Démeter y Poseidón). Los cráteres de su superficie, por su parte, reciben sus nombres de personajes y lugares de diferentes mitos de la creación.

Su composición

Comparación del tamaño de la Tierra, la Luna y Rea.

Comparación del tamaño de la Tierra, la Luna y Rea.

Rea es principalmente un satélite de hielo (alrededor de las tres cuartas partes son hielo, mientras la cuarta parte restante es roca). Su superficie es altamente reflectiva a consecuencia del hielo (algo que comparte con Encélado). El análisis de Rhea, llevado a cabo por la sonda Cassini, también nos ha llevado a la conclusión de que el satélite no tiene un núcleo de hielo. Es más bien como si fuese una especie de gigantesca bola de nieve sucia, con hielo y rocas mezclados sin ningún orden. En cualquier caso, la temperatura oscila entre los -174 y los -220ºC, es decir, es tan baja que el comportamiento del hielo es idéntico al de una roca.

Rea es uno de los satélites con mayor cantidad de cráteres del sistema solar. Las zonas más castigadas (que contienen el terreno más brillante) muestran impactos con un tamaño superior a 40 kilómetros, mientras que las regiones cercanas a los polos y el ecuador tienen cráteres mucho más pequeños. En cualquier caso, este satélite está muchísimo más castigado que Tetis y Dione. Hay dos explicaciones posibles para entender por qué tiene tantos cráteres: la primera es que se encuentra más lejos del planeta que Tetis y Dione, así que la influencia gravitacional de Saturno es menor, y por tanto no provocaría el descongelamiento y recongelación de los cráteres de estos últimos (que presentan unas superficies mucho más lisas). La segunda es, simplemente, que como es la más distante (orbita alrededor de Saturno a unos 525.000 kilómetros de distancia, es decir, 1,5 veces la distancia entre la Tierra y la Luna) está más expuesta a recibir más impactos.

Es motivo de varias investigaciones

La superficie de Rea está llena de cráteres. Es tal la cantidad, que es uno de los satélites del Sistema Solar más castigado. Crédito: NASA/JPL-Caltech/Space Science Institute

La superficie de Rea está llena de cráteres. Es tal la cantidad, que es uno de los satélites del Sistema Solar más castigado.
Crédito: NASA/JPL-Caltech/Space Science Institute

A día de hoy, sabemos que existe una tenue atmósfera de oxígeno alrededor de Rea (de hecho, es el primer cuerpo celeste, al margen de la Tierra, en el que tenemos una evidencia directa de que haya una atmósfera de oxígeno). Eso sí, es muy fina, y el oxígeno está presente en una densidad 5 billones de veces inferior a la de nuestra atmósfera. Los científicos creen que el oxígeno puede ser liberado por la radiación que sufre la superficie del satélite debido a la magnetosfera de Saturno. También hay dióxido de carbono, y no se tiene demasiado claro de dónde procede; podría ser de un proceso de radiación similar, o bien del hielo seco, como sucede en el caso de los cometas.

Pero no terminan ahí las investigaciones curiosas sobre Rea. Hasta no hace mucho, los científicos creyeron que era posible que el satélite tuviese tres pequeñas bandas de pequeñas partículas (con tamaño, como mucho, de piedras). Dicho de otro modo, durante un tiempo se creyó que Rea tenía anillos. La sonda Cassini nos hizo saber que no era el caso (aunque, parafraseando aquel chiste de que lo que Chuck nos da, Chuck nos lo quita, también podríamos decir que fue la propia Cassini la que nos dio la información sobre la atmósfera de oxígeno).

Sea como fuere, aunque de momento no hemos encontrado ningún satélite que tenga anillos, sabemos que no sólo los planetas tienen. Un asteroide, llamado Cariclo, también posee un sistema de anillos.

Referencias: Space.com y Universe Today