El proyecto SETI puede parecer difícil de justificar, o entender, si tenemos en cuenta que no hemos encontrado señales de vida en otros lugares de la galaxia. Sin embargo, ha comenzado a circular una noticia que es un buen recordatorio de por qué vale la pena este tipo de trabajos…

Una señal intensa desde la constelación de Hércules

El radiotelescopio RATAN-600 en Zelenchukskaya. Crédito: Wikimedia Commons

El radiotelescopio RATAN-600 en Zelenchukskaya.
Crédito: Wikimedia Commons

Un equipo internacional de investigadores ha anunciado la detección de una señal intensa procedente de la estrella HD 164595, en un documento que está comenzando a circular en la comunidad científica. La detección fue realizada por medio del radiotelescopio RATAN-600 (ubicado en Zelenchukskaya, en Rusia, cerca de la frontera de Georgia), el más grande del mundo con un diámetro de 576 metros.

La señal fue recibida el pasado 15 de mayo de 2015 y es lo suficientemente intensa como para que haya captado la atención de los investigadores porque su origen podría ser artificial. Eso no quiere decir que estemos ante el mensaje de una civilización extraterrestre, pero hacía mucho tiempo que no nos encontrábamos con una señal de este tipo. En cierto modo, podríamos decir que recuerda lejanamente a la popular señal Wow!

Concepto artístico de una esfera de Dyson. Crédito: Adam Burn

Concepto artístico de una esfera de Dyson, una estructura hipotética que podría ser construida por civilizaciones muy avanzadas (si existen).
Crédito: Adam Burn

Nadie está afirmando que esto haya sido producido por una civilización extraterrestre, pero desde luego parece un buen lugar al que apuntar nuestros radiotelescopios para poder escuchar cualquier otra señal que pudiese llegar desde allí. Por la intensidad de la señal, los investigadores dicen que si la señal procede de una báliza isotrópica (es decir, que emite su señal uniformemente en todas las direcciones en el espacio), sólo sería posible para una civilización de tipo II en la escala de Kardashov.

Por el contrario, si se trata de una señal enviada específicamente en la dirección del Sistema Solar, necesitaría una cantidad de energía disponible para una civilización de tipo I en la misma escala (en la que, por cierto, la humanidad todavía no habría alcanzado el tipo I). Claro que hay una posibilidad que podría ser mucho más mundana, y es que no se trate más que de algún tipo de ruido captado por el radiotelescopio. De hecho, un grupo de astrónomos en París cree que podría tratarse de una señal, procedente de un objeto mucho más distante, amplificada por la estrella. La señal es lo suficientemente tentadora como para que los investigadores de RATAN-600 estén pidiendo que HD 164595 sea monitorizada de manera permanente.

¿Qué sabemos de la estrella?

Este gráfico muestra la señal recibida desde HD 164595. Crédito: Bursov et al.

Este gráfico muestra la señal recibida desde HD 164595.
Crédito: Bursov et al.

Sabemos que HD 164595 es una estrella con casi la misma masa que el Sol (0,99 masas solares), a una distancia de 91 años-luz, en la constelación de Hércules y una edad estimada de unos 4.500 millones de años; también tiene una metalicidad casi idéntica a la de nuestra estrella. Sabemos que allí hay un planeta, HD 164595 b, que tiene el unas 16 veces la masa de la Tierra (o 0,05 veces la masa de Júpiter) y tarda 40 días en completar una órbita, por lo que se cree que podría ser un planeta similar a Neptuno, mucho más cálido, en una órbita circular. También podría haber otros planetas que no hayamos detectado todavía.

Para rematar el artículo, vale la pena destacar que entre los puntos más flojos (y seguramente uno de los motivos por lo que esta noticia no está teniendo una repercusión mucho más grande) es que la señal de momento no parece haber sido confirmada en otros radiotelescopios, lo que impide descartar por completo que lo que fue captado por RATAN-600 no fuese alguna interferencia local.

También parece poco probable que pudiese ser un mensaje enviado expresamente a nuestro planeta si tenemos en cuenta la distancia. Supongamos que realmente se trata de un mensaje (igual que nosotros enviamos, en su momento, el mensaje de Arecibo), en el momento en el que lo enviaron estaban viendo la Tierra tal y como era a principios del siglo XIX.

Sea como fuere, de momento no se está planteando que se haya captado el mensaje de una civilización extraterrestre. Simplemente, que la señal es lo suficientemente interesante como para prestar atención a HD 164595 por si pudiera haber más señales como ésta…

Actualización 01/09: Investigadores rusos han confirmado que la señal ha sido producida por un satélite militar ruso, por lo que queda claro que el origen de esta señal era mucho más cercano de lo que se podía pensar en un principio. Como comentaba en el artículo, uno de los puntos más flojos en este asunto era que sólo hubiese sido captada por el telescopio RATAN-600, y ahora se confirma que ha sido otra falsa alarma. De momento, la única señal a la que no le hemos conseguido dar una explicación satisfactoria, pero que tampoco se ha vuelto a repetir, ha sido la señal Wow!

Referencias: Centauri Dreams